La aviación rusa bombardeó hoy varios objetivos del Estado Islámico en Siria con misiles de última generación «de alta precisión», informó el Ministerio de Defensa ruso.
Según un comunicado, los ataques lanzados por bombarderos estratégicos TU-95 alcanzaron y destruyeron tres grandes depósitos de armas y un puesto de mando de este grupo yihadista junto a la ciudad de Akerbat.
Tras la operación «todos los bombarderos estratégicos regresaron a sus bases», agregó el comunicado de Defensa, que precisó que el ataque se efectuó desde una distancia de 1.000 kilómetros.
La cobertura aérea del ataque lanzado por los TU-95 fue efectuada por cazas rusos Su-30 emplazados en la base siria de Jmeimim, en la provincia de Latakia.
Los X-101 son misiles de crucero aire-tierra fabricados con tecnologías que dificultan su detección por radares y tienen un alcance máximo de 4.500 kilómetros.
Este tipo de cohetes puede portar cargas nucleares, en cuyo caso recibe la denominación X-102.
Fuente: Crónica