El crédito de la banca comercial a empresas y familias creció en mayo al menor ritmo anual en dos años, un desempeño influido por el repunte de la inflación y la menor demanda de financiamiento, mostraron datos oficiales.
La cartera de préstamos de la banca comercial al sector privado –que incluye los otorgados a empresas y familias– repuntó en mayo a una tasa anual de 7.7 por ciento en términos reales, es decir, descontado el efecto de la inflación, reportó la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).
La tasa de crecimiento de mayo fue menor a la de abril, cuando aumentó a un ritmo de 9.5 por ciento real.
«El resultado de mayo vino después de dos meses en que la tasa anual repuntó; ahora se ubica nuevamente cerca del mínimo de dos años, que fue de 7.6 por ciento en enero y febrero de este año», comentó Citibanamex.
Los tres principales circuitos de crédito bajaron su ritmo de expansión anual en mayo, a tasas menores a las anticipadas, añadió Citibanamex.
Los créditos a empresas subieron 10 por ciento real anual, menor al incremento de 12.5 por ciento en abril y 11.5 por ciento de la previsión de los analistas del grupo financiero.
En el caso de los préstamos a hogares, los dos segmentos que componen este rubro siguieron desacelerándose: los créditos hipotecarios crecieron 3.6 por ciento real anual, ritmo menor al de 4.5 por ciento de un mes antes; y, al consumo, repuntaron 4.1 por ciento, también anual y en términos reales, por abajo del 4.9 por ciento en abril, según los datos de la CNBV.
«El descenso en parte se explica por la mayor inflación anual; en términos nominales, el crédito mantiene un ritmo de crecimiento anual relativamente alto, al ubicarse en 14.3 por ciento en mayo versus 15.0 por ciento en diciembre. No obstante, mantenemos nuestro pronóstico de una desaceleración adicional del crédito vigente de la banca comercial al sector privado en lo que resta del año, para cerrar 2017 con un avance real anual de 7.1 por ciento», comentó Citibanamex.
La diferencia entre el crecimiento nominal y el real es que el segundo resta el efecto de la inflación, que en los primeros meses de este año se disparó por el alza en el precio de los combustibles y el efecto de la depreciación del peso sobre el precio de algunos productos.
Mayor morosidad
Al cierre de mayo, la cartera vencida en el segmento de préstamos de consumo se ubicó en 39 mil 724.4 millones de pesos, 14.94 por ciento más que la registrada en el mismo mes del año pasado, de acuerdo con los datos de la CNBV.
La cartera de crédito en el segmento de consumo se ubicó en mayo de este año en 917 mil 424 millones de pesos y de ellos, 4.33 por ciento, esto es, 39 mil 724.4 millones se encontraban en cartera vencida, esto es, que no fueron pagados en los plazos originalmente pactados.
Fuente: La Jornada