La cantante y actriz mexicana Eiza González señaló que se encuentra sumamente orgullosa de su participación en el filme “Baby: El aprendiz del crimen”, en un papel que, dijo, no denigra a las mujeres y mucho menos a los latinos.
Eiza regresa a su tierra natal, acompañada del actor Ansel Elgort y el director Edgar Wright para presentar su nueva producción fílmica la cual llegará a salas nacionales el próximo 10 de agosto.
“Como mexicana me siento súper orgullosa de estar en mi país presentando una película de este nivel y representando a las latinas de una manera inteligente con un personaje divertido sin denigrar a la mujer”, compartió en entrevista con Notimex.
En la cinta interpreta a “Darling” una mujer perteneciente a un grupo de criminales que se dedica a robar bancos, es por ello que su personaje requiere de una personalidad ruda, sin dejar de lado la sensualidad.
“Este personaje me fascinó porque de naturaleza soy ‘tomboy’, tengo esa parte muy femenina; pero en realidad soy como un niño, de hecho, siempre fue mi sueño manejar coches y disparar armas. Crecí con puros hombres y un hermano 13 años mayor que yo, entonces me encanta que en este papel pueda incluir algo de mi personalidad”.
La también cantante reconoce que no ha sido fácil desprenderse de la imagen de “niña buena e inocente” que la caracterizaba en producciones mexicanas; sin embargo, interpretar otro tipo de papeles le ha ayudado reconocer su lado multifacético.
“El giro con mis personajes en estos proyectos estadunidenses fue algo que me sorprendió, porque por muchos años fui vista en este país como la niña buena y viví con esos personajes por tanto tiempo que hasta yo me la creí pero el iniciar mi carrera en el extranjero me hizo darme cuenta que los límites te los pones tú”.
De igual manera admite que la decisión de emprender una trayectoria en Estados Unidos influyó en los límites que se le ponían para poder desarrollarse como actriz.
“Nunca se me fue permitido entrar a otro tipo de personajes, y creo que influyó el hecho de que inicié desde muy pequeña, crecí en la industria reflejando este tipo de inocencia, pero gracias a Dios conocí a Robert Rodriguez , con quien trabajé en ‘From dusk till dawn’ y a Edgar Wright que me permitieron abrir la puerta a otros mundos”.
Finalmente, comentó que dar a conocer su trabajo no ha sido fácil, “como lo es para cualquiera, el tratar de ganarte un lugar en la industria es complicado, no importa de dónde vengas; sin embargo, tienes que dar todo de ti para demostrar de lo que eres capaz”.
Fuente: 24 Horas