Tras 46 días hospitalizado y con grave riesgo de perder la vida, el sacerdote José Miguel Machorro, atacado y herido mientras celebraba misa en la Catedral Metropolitana de México el pasado 15 de mayo, fue dado de alta la mañana del sábado y continuará su recuperación en Tehuacán, Puebla acompañado por su familia.
De acuerdo al director de comunicación social de la Arquidiócesis de México, Hugo Valdemar, desde el jueves pasado la salud de Machorro Alcalá experimentó una gran mejoría con el restablecimiento de sus vías respiratorias, por lo que ya no hubo necesidad de apoyo mecánico sin embargo, los aspectos motrices siguen en duda.
«El padre Machorro fue dado de alta el sábado por la mañana, ahora se encuentra con sus familiares en recuperación y probablemente llevará una terapia para ver qué tanto puede recuperar movimientos”, señaló Valdemar.
Desde el pasado 20 de junio, cuando el padre José Miguel Machorro dejó el área de terapia intensiva se concluyó que requiere de rehabilitación neurológica y pulmonar tras las lesiones sufridas a causa de un arma punzocortante.
El 22 de mayo, un juez de control de la Ciudad de México vinculó a proceso a Juan René Silva Martínez por apuñalar al presbítero y actualmente se mantiene bajo vigilancia en el Centro Varonil de Readaptación Psicosocial.
Deberá ser antes del 22 de septiembre cuando la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México concluya la investigación sobre el atentado al padre Machorro Alcalá, para que el juez de control revise los resultados de las indagatorias y finalmente defina la situación jurídica del agresor.
Fuente: Excélsior