Durante la madrugada de este martes fue asaltada la oficina de nuestro medio digital www.endirecto.com.mx.
El golpe fue preciso: los ladrones sólo se llevaron las computadoras y discos duros de la dirección y la administración.
Los equipos de la redacción y diseño –en su mayoría mucho más costosos que los que se llevaron-, quedaron intactos.
Nuestra oficina se localiza en avenida Félix Cuevas 326 interior 7 esquina con la calle de Patricio Sanz, en la colonia Del Valle, en una zona ampliamente concurrida.
Estamos en el segundo piso de un pequeño edificio de 4 plantas que da cobijo a 15 despachos y a negocios de comida en la parte baja.
Sólo entraron a nuestra oficina que se localiza en el segundo piso. Lo hicieron destruyendo las chapas y forzando violentamente las puertas.
Ya dentro, los asaltantes forzaron archiveros, revolvieron documentos, y desconectaron, no arrancaron, lo que se ve previamente les importaba. Sólo eso.
Sin duda es un nuevo golpe contra un medio de comunicación, y quienes laboramos y colaboramos en él.
En www.endirecto.com.mx escribimos cotidianamente los periodistas Roberto Vizcaíno –director de en directo-; Carlos Ramírez, Miguel Ángel Rivera, Ubaldo Díaz, Adriana Moreno, Francisco Gómez Maza, Héctor Moctezuma, Luis Carlos Rodríguez, Luis Repper Jaramillo, Moises Sánchez Limón y Pedro Jiménez.
Sin embargo nuestro espectro periodístico es mucho más amplio al incluir en nuestros espacios trabajos de otros muchos medios, amigos y compañeros periodistas.
Hoy nos tocó a nosotros. Antes, la lista de periodistas y medios es larga, e involucra ejecuciones.
No tenemos ninguna duda: lo que les interesaba era nuestro trabajo periodístico.
¿Quiénes fueron?, ¿Qué sigue?, ¿es un mensaje para el medio o para el conjunto de sus colaboradores y del resto del gremio o para alguien en especial?
Sin duda un evento de esta naturaleza nos deja muchas dudas y reflexiones. Es evidente nuestra vulnerabilidad. Sabemos que la inseguridad no sólo es nuestra, es de todos los periodistas, y de la sociedad misma.
Sin embargo, no podemos dejar de lado que cualquier ataque a medios de información y periodistas es un ataque contra la libertad de expresión.
Y, aunque pudiera parecer ocioso, inútil en las condiciones en que vivimos los medios y los periodistas en este momento de México, pedimos no solo una investigación a fondo de estos hechos, sino garantías para ejercer nuestro trabajo.