Alfredo Román Messina, secretario de Salud de la entidad, descartó que la muerte de seis recién nacidos en el Hospital General de Los Mochis, en un lapso de 10 días, tengan conexión.
Señaló que gente especializada de Culiacán acudió al hospital para realizar las pruebas pertinentes y el resultado podría estar listo el próximo lunes 24 de julio.
Román Messina explicó que uno de los bebés falleció por hidropesía fetal, mientras que la muerte de los otros puede estar relacionada con su nacimiento prematuro, “tenían un bajo peso pues su gestación fue de entre 25 y 27 semanas, eran susceptibles a presentar complicaciones, por lo que su fallecimiento no se derivó de contagios por bacterias”.
En respuesta a quien colocó una manta cerca del Hospital General de Los Mochis, donde se alerta a la población a no confiar en el personal médico por el caso de las defunciones de recién nacidos, Román Messina dijo que no le preocupa.
Subrayó que no existen sospechas del brote de una epidemia de bacterias en las áreas de Nonatos; sin embargo, se practican cultivos en diversas áreas para certificar la limpieza que se guarda el todo el centro médico, sobre todo en las área de Terapia Intensiva y de cuneros.
Hizo hincapié que se encuentra en marcha una investigación a fondo sobre las seis defunciones que se han registrado en un lapso de una semana, para emitir un dictamen final científico.
El Departamento de Epidemiologia de la Secretaría de Salud de la entidad informó que activó los protocolos para tender un cerco epidemiológico en todos los hospitales del sector público, en tanto se continúan con la práctica de cultivos, en busca de bacterias.
El subdirector médico del hospital, Joel García Espinoza, explicó que la tasa de defunciones de recién nacidos en forma prematura alcanza 25% y es imputable a que sus organismos no se alcanzan a desarrollar, y no tienen defensas.
Lamentó que en redes sociales, el pasado fin de semana, se subieran datos y comentarios carentes de sustento, con relación a los tres primeros fallecimiento de infantes, en el sentido que se había derivado de un brote de bacterias.
En octubre de 2015, a raíz de las defunciones de 23 recién nacidos en forma prematura, en el Hospital Regional del IMSS de esta ciudad, presuntamente a causa de la bacteria Klebsiella, 19 padres de familia presentaron denuncias. Unos 300 funcionarios de la delegación del IMSS han sido citados a declarar. La investigación sigue abierta.
Fuente: El Universal