El paro en la producción de la refinería de Salina Cruz en Oaxaca privará al país durante más de un mes y medio de casi 10 por ciento de la gasolina que se consume diariamente, según cifras de Petróleos Mexicanos (Pemex), por lo que dicho faltante deberá de importarse del extranjero para satisfacer la demanda.
La refinería Antonio Dovalí Jaime, ubicada en el municipio de Salina Cruz, Oaxaca, tuvo que parar operaciones el pasado miércoles 14 debido a un incendio ocasionado por el paso de la tormenta tropical Calvin, informó Pemex.
El jueves pasado la empresa informó que la planta, la de mayor capacidad en el país y en donde también se elaboran diversos productos petrolíferos, como turbosina, asfaltos y coque, volverá a operar hasta el 30 de julio próximo, 47 días fuera de operación.
De acuerdo con cifras de Pemex en los primeros cinco meses del año la refinería de Salina Cruz produjo 75 mil 714 barriles de gasolinas automotrices diarios, 9.7 por ciento de los 778 mil 900 barriles de gasolina que se vendieron en el país diariamente en promedio en el mismo periodo.
Fuentes de Petróleos Mexicanos comentaron que se recurrirá a mayores importaciones de combustibles automotrices para satisfacer la demanda interna, aunque los otros petrolíferos que produce la refinería se sustituirán con lo que aportan las otras cinco refinerías (Cadereyta, Madero, Minatitlán, Salamanca y Tula).
Se desconoce el impacto económico para la petrolera por las importaciones debido a que la cantidad que se comprará en el exterior dependerá de la demanda, dijeron las fuentes.
Pemex informó mediante un comunicado que trabaja en la instalación de un nuevo cuarto de bombas para la alimentación de crudo a la refinería, pues el que había resultó dañado por el incendio.
También informó que aprovechará el paro de actividades para dar mantenimiento a la refinería, que estaba planeado para abril próximo, con lo que se reducirá el impacto económico del paro. También se llevarán a cabo labores de limpieza y rehabilitación del área afectada.
La refinería de Salina Cruz, que inició sus operaciones en abril de 1979, ocupa una superficie total de 600 hectáreas y está localizada a cinco kilómetros al noreste de la ciudad y puerto de Salina Cruz, uno de los más importantes del Pacífico mexicano.
Tiene capacidad para procesar 330 mil barriles de petróleo crudo diarios que se extraen de los yacimientos localizados en Tabasco, Chiapas y la sonda de Campeche.
La distribución de los productos refinados se efectúa mediante la terminal de venta terrestre localizada en Salina Cruz, la cual abastece a Oaxaca, Chiapas, Veracruz, Tabasco, Yucatán y la Ciudad de México.
Fuente: La Jornada