El rey Salman de Arabia Saudita nombró a su hijo, Mohammed bin Salman, como nuevo príncipe heredero, en una importante remodelación de la estructura gubernamental del reino anunciada este miércoles.

Un decreto real retiró al príncipe heredero Mohammed bin Nayef, sobrino del rey, de 57 años, como sucesor del trono y lo reemplazó con Mohammed bin Salman, de 31 años, que anteriormente era el viceprimer príncipe heredero.

Según la agencia oficial de prensa saudita, SPA, el recién anunciado príncipe heredero también fue nombrado viceprimer ministro y mantuvo su puesto como ministro de Defensa.

El ex príncipe heredero también fue despedido de su puesto como ministro del Interior, señaló el decreto y fue designado en el cargo del emir Abdulaziz bin Saud bin Nayef, hasta ahora gobernador de la región del Este del país.

El Consejo Allegiance de Arabia Saudita votó 34 a 31 en favor de los cambios, según el canal estatal al-Arabiya.

Estaba planeado que Mohamad bin Nayef sucedería al rey saudita al frente del reino, pero recientemente el monarca saudí ha emitido diferentes decretos reales que ponen a los aliados de su hijo Mohammed en los puestos estratégicos de la gestión del país.

El rey saudita pidió el miércoles una promesa pública de fidelidad al nuevo príncipe heredero, añadió el canal.

Algunos observadores opinaron que el ascenso de Mohammed bin Salman al poder bajo el reinado de su padre también podría acelerar su ascensión al trono.

El joven príncipe era poco conocido por los sauditas y en la comunidad internacional antes de que Salman se hiciera rey en enero de 2015. Había estado anteriormente a cargo de la corte real de su padre cuando Salman era el príncipe heredero.

Durante el fin de semana, el rey había emitido un decreto que reestructuraba el sistema de Arabia Saudita para los enjuiciamientos que despojaron a Mohammed bin Nayef de poderes de larga data supervisando investigaciones criminales.

En su lugar, el rey Salman ordenó que una recién nombrada Oficina del Ministerio Público y fiscal se reportara directamente al monarca.

Mohammed bin Nayef al parecer no desempeñó un papel significativo en los esfuerzos de Arabia Saudita y de Estados Árabes Unidos para aislar a Qatar por su supuesto apoyo a los grupos islámicos y sus lazos con Irán.

A pesar de las ambiciones de Mohammed bin Salman, que incluye la revisión de la economía del reino lejos de su dependencia del petróleo, el príncipe ha enfrentado críticas por la guerra dirigida por Arabia Saudita en Yemen, que supervisa como ministro de Defensa.

La guerra, lanzada hace más de dos años, no ha logrado desalojar a los rebeldes aliados iraníes conocidos como Houtíes de la capital, Saná, y ha tenido efectos devastadores en el empobrecido país.

Grupos de derechos humanos aseguran que las fuerzas sauditas han matado a decenas de civiles y han pedido a Estados Unidos, así como al Reino Unido y Francia, que pongan fin a la venta de armas a Arabia Saudita que podrían utilizarse en la guerra de Yemen.

Fuente: Crónica