Juan José Guerra Abud, Embajador de México en Italia, dijo que se envió una carta de sorpresa e indignación al súper intendente que es el director general de la Opera de Roma por presentar imágenes burdas de México, que distorsionan la realidad en presentación de la ópera «Carmen», que se estrenó este jueves en Roma.
En entrevista con José Cárdenas, el diplomático mexicano, narró que la Embajada mexicana ha expresado indignación por lo que considera una visión caricaturesca de México en la versión de la ópera «Carmen» que interpreta una argentina llamada Valentina Carrasco.
Dijo cada año se presenta un programa de opera que atrae a visitantes de todo el mundo, «y este año nos enteramos que se iba a presentar ‘ Carmen’ dentro del programa y a principios de la semana nos enteramos que se pensaba escenificar la obra tomando el tema de la frontera de México y Estados Unidos, al final, nos enteramos y vimos una fotografías en donde se pretendía exponer unas imágenes de la virgen de Guadalupe, asociadas a la Santa Muerte».
Ante ello, expuso que México respeta todas las creencia religiosas, no se mete en cuestiones de religión pero creemos que eso podría ofender a una gran cantidad de mexicanos, «por eso nos dirigimos al súper intendente que es el director general de la opera de Roma… se pidió que se pudieran evitar y de inmediato dijo que se iban a modificar esas imágenes porque en ningún momento se faltaría al respeto a la Virgen de Guadalupe».
El día de la presentación de la ópera, acudió el Agregado Político de la Embajada de México y otros mexicanos quienes expresaron que se presentan imágenes verdaderamente burdas de la frontera de nuestro país, «aunque sí corrigieron la imagen de la Virgen de Guadalupe».
Especificó que en la obra se presenta como escenografía de la frontera norte de México a niños drogándose, «mujeres de la mala vida, y por eso se mandó una carta donde manifestamos nuestra extrañeza de la imagen que se da de nuestro país, por lo que se pide que no se distorsione la imagen de México», y aclaró que no se busca que se suspenda la obra, porque se respeta la promoción cultural que cada quien quiera hacer, «pero nos extraña que se presente una visión distorsionada de nuestro país».