Líderes iraníes acusaron este viernes a Estados Unidos y Arabia Saudita de apoyar el doble ataque que causó 17 muertos en Teherán esta semana. El grupo extremista Estado Islámico se atribuyó la autoría del atentado.

El líder supremo del país, el ayatolá Ali Jamenei, dijo que el incidente aumentará el odio que sienten los iraníes hacia Washington y Riad.

En un mensaje de condolencias antes del funeral por las víctimas, Jamenei apuntó que el ataque del miércoles “no dañará la determinación de la nación iraní y el resultado obvio no es otro más que un incremento en el odio a los gobiernos de Estados Unidos y a sus socios en la región como (Arabia) Saudí”, según reportaron medios estatales.

Los investigadores trabajan para determinar si Arabia Saudí está implicada en las agresiones, explicó el jueves el ministro iraní de Inteligencia, Mahmoud Alavai, agregando que es demasiado pronto para extraer conclusiones.

Durante el funeral del viernes, el presidente del Parlamento, Ali Larijani, acusó a Estados Unidos de ser la versión “internacional” del Estado Islámico y dijo que Washington intercambió democracia por dinero, en referencia a un reciente acuerdo armamentístico con Arabia Saudí. La televisora estatal iraní emitió la ceremonia en vivo.

Añadió que las declaraciones contrarias a Irán realizadas por el ministro saudí de Exteriores y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, son “motivo de desgracia” para ellos mismos.

Larijani criticó además la decisión del Senado estadounidense de seguir adelante con un nuevo conjunto de sanciones contra la República Islámica, que incluyen a sus tropas de élite: la Guardia Revolucionaria. La decisión se tomó en el mismo día de los ataques extremistas en Teherán.

Fuente: Staff