La mejora de su servicio, del drive, la actitud, la resiliencia o la confianza en sí mismo son algunas de las diez claves del éxito del tenista español Rafa Nadal, reciente campeón de Roland Garros, título que levanta por décima vez en su carrera deportiva.
1) El servicio. Siempre fue uno de los puntos a mejorar del tenista manacorí. Sin embargo, desde que volvió a las pistas esta temporada, su estadística ha mejorado. Según un estudio de Infosys publicado en el mes de mayo, Nadal es el tenista del Top 10 que más ha evolucionado con su saque de la temporada pasada a esta, pasando de un 61’4% a un 66’3% de efectividad.
Así lo demostró el balear durante el primer set de la final del Grand Slam parisino ante el suizo Stan Wawrinka, cuando logró un 82% de acierto con su primer servicio.
2) El ‘drive’. Ya durante el Abierto de Australia, el actual número dos del mundo señaló que era uno de sus objetivos en su regreso a las pistas y lo ha conseguido gracias, en parte, a unos pequeños ajustes en su raqueta.
«He añadido un poquito de peso en la punta de la raqueta para hacer más daño en mis golpes, sobre todo en el saque y el ‘drive'», afirmó entonces Nadal tras conseguir el pase a los octavos de final del Abierto de Australia ante el alemán Alexander Zverev. También ayer en la final de Roland Garros fascinó a los aficionados al tenis con en el segundo set, que finalizó 6-3, con un drive paralelo sin mirar y ajustado a la línea que atemperó un revés cruzado. La pista se puso en pie. Y Warinka no tuvo más remedio que aplaudir con discreción.
3) La actitud. Su tío y entrenador, Toni Nadal así lo ha destacado en varias momentos, refiriéndose a ello como su transformación «más notable». Según su entrenador, Nadal ha vuelto a relajarse, a estar feliz en la pista.
4) El ‘efecto Moyá’. El ex tenista español Carlos Moyá se incorporó este año al equipo técnico de Nadal con la idea de aportarle frescura y desde entonces el manacorí ha ganado Montecarlo, Godó en Barcelona, Madrid y un Grand Slam (Roland Garros), además de disputar la final de Australia.
Su nuevo entrenador es también uno de sus grandes amigos. «Más que a mi jugador, en Rafa veo a mi amigo y eso hace que el sufrimiento sea mayor pero la alegría también es más grande», decía Moyá en Eurosport después de la victoria del balear en París.
5) La sencillez y la simplicidad. Sus gestos en esta línea son noticia de manera habitual tanto dentro como fuera de la pista. Prueba de ello fue la interrupción de un partido para ayudar a que una madre encontrara a su hija o en la misma celebración de su décimo Roland Garros, cuando se dirigió hacia el palco de autoridades a saludar con un gesto sencillo al rey emérito Juan Carlos.
6) La resiliencia. En psicología y sociología es la capacidad humana de asumir con flexibilidad situaciones límite y el saber sobreponerse a ellas. Como ejemplo, el partido número 1.000 de la carrera profesional de Nadal, en el último Abierto de Estados Unidos, cuando fue capaz de reaccionar y ganar un partido en el que perdió el primer set por 0-6 ante el alemán Phillip Kohlschreiber.
7) El físico. El extenista barcelonés Francis Roig es el encargado de preparar físicamente a Rafa. En ese inicio de temporada ha vuelto a mostrar su habitual fuerza en el golpeo, su resistencia y puede llegar a bolas imposibles.
La próxima prueba del número dos del mundo será la hierba, una superficie mucho más complicada para sus rodillas que la tierra batida, y en la que el tenista balear tiene marcado en el calendario la próxima edición de Wimbledon, a disputar a partir del 3 de julio.
8) La confianza. El psicólogo deportivo Aurelio Olmedilla destaca que esta característica influye «directa y absolutamente en la consecución de éxitos» y que Nadal disfruta de una buena confianza, pues «es una persona humilde dentro de la competición y cuenta con sistemas de alerta» que le advierten de que puede perder en algún momento.
9) La autoridad de Toni Nadal. Dice el entrenador del campeón de Roland Garros en su libro ‘Todo se puede entrenar’, de Alienta Editorial, que la suya es «de antiguo cuño». «He intentado que sea la autoridad del que guía e instruye y jamás una autoridad violenta, caprichosa o abusiva», escribe el técnico balear, que pudo celebrar en la pista la décima victoria de su sobrino en el prestigioso torneo parisino.
10) La fortaleza mental. Esta cualidad es la que permite a Nadal seguir compitiendo al máximo nivel a sus 31 años y aguantar, por ejemplo, derrotas como las sufridas en Melbourne (Australia) e Indian Wells (Estados Unidos) ante el suizo Roger Federer en las dos primeras finales a las que llegó en este 2017.
Después, vinieron sus triunfos en Montecarlo, Barcelona, Madrid y París y ahora es Wimbledon, donde también estará Roger Federer, y una posible vuelta al número uno del mundo, lo que aparece en el horizonte del tenista manacorí.
Fuente: Terra
#EnContexto Rafael Nadal impone récord al conquistar el Abierto de Francia por décima ocasión