La Comisión de Derechos Civiles de Estados Unidos, un organismo federal bipartidista, anunció una investigación durante dos años de la administración del presidente Donald Trump, para examinar la capacidad de función de las dependencias en este rubro.
El organismo acordó por unanimidad llevar a cabo una investigación de dos años sobre el «grado en que los presupuestos actuales y los niveles de personal permiten que las oficinas de derechos civiles se desempeñen» durante el gobierno de Trump.
En un comunicado, la comisión expresó preocupación de que los recortes presupuestarios a las oficinas de derechos civiles del gobierno federal impliquen «una peligrosa reducción de la aplicación de los derechos civiles en todo el país”, afectando a comunidades de color, diversidad sexual (LGBT), con discapacidades y otros grupos marginados.
La instancia agregó que la decisión del Departamento de Justicia de colocar agentes de inmigración y aduanas en los tribunales representa «un peligroso impedimento para el acceso a la justicia para todos los estadunidenses».
También resaltó riesgos por la disminución del presupuesto para la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia, al proponer la reducción de 121 puestos de trabajo.
El informe alertó sobre recortes presupuestarios en el Departamento de Educación, incluyendo la eliminación de 46 puestos de tiempo completo en la Oficina de Derechos Civiles, así como en el Departamento de Trabajo, el Departamento de Salud y Servicios Humanos y la Agencia de Protección Ambiental.
«Durante 60 años, el Congreso ha encargado a la Comisión que vigile la aplicación de los derechos civiles federales y recomiende el cambio necesario. Tomamos muy en serio esta acusación y esperamos reportar nuestras conclusiones al Congreso, al presidente y al pueblo estadunidenses», dijo la presidenta del órgano, Catherine Lhamon.
Fuente: La Razón