A partir del 2018, el gobierno mexicano desaparecerá el aparato de espionaje político que hoy se dedica a escuchar hasta «a los a periodistas de casa», sentenció Andrés Manuel López Obrador, presidente de Morena.
El ex candidato presidencial hizo el anuncio desde sus cuentas en redes sociales, al reprobar el hecho de la presunta intervención telefónica ilegal a defensores de derechos humanos y comunicadores en México, dada a conocer esta semana.
Para López Obrador, tanto el espionaje político como la simulación de democracia que se hace desde el INE y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, representan un gasto millonario para los mexicanos y contradictoriamente, son los ámbitos donde más fraudes a la ley se registran.
«Cuando triunfe nuestro movimiento vamos a reducir el gasto en estos organismos electorales, ya no van a ganar los consejeros, los magistrados del Trife, 300 o 400 mil pesos mensuales (…) En vez de atender los problemas de la inseguridad pública, los problemas que tienen que ver con la inseguridad nacional se dedican a espiar a los opositores y ahora a los periodistas, hasta los periodistas de casa», comentó en un video.
En seguida, el tabasqueño expresó su descontento con la agresión que representa para los comunicadores escuchar ilegalmente sus conversaciones privadas.
«Nosotros reprobamos esa actitud, es una estrategia perversa que corresponde a un régimen autoritario, el que nada debe nada teme, cuando triunfe nuestro movimiento pues va a desaparecer el CISEN, no va haber espionaje político, se va a garantizar las libertades, no van haber intervenciones telefónicas», aseguró al afirmar que desde el gobierno federal se implementan dichas acciones.
En la parte final de su mensaje, López Obrador expresó que se vive un régimen putrefacto y por eso es su lucha.
Fuente: Excélsior