Donald Trump dio un paso más hacia su impeachment, mecanismo recogido en la ley para la destitución de un presidente, tras despedir de forma fulminante al que era director del FBI, James Comey. Así lo ve parte del arco político estadounidense y algunos analistas internacionales.
La salida de Comey se dio en un contexto de investigación de los lazos de la campaña de Trump con el Kremlin ruso. Aunque el presidente basó la decisión del despido en recomendaciones del Departamento de Justicia, a través del fiscal general Jeff Sessions, hay sospechas de que la decisión se tomó por motivos personales. Si en un principio se argumentó que se prescinde de Comey por no tener el control de la institución, algo desmentido por su sucesor, las últimas informaciones revelan a que Trump ya tenía la decisión tomada desde hace tiempo.
Crecen las críticas a Trump
El panorama no se enfría tras el despido de Comey. De hecho, se avivan las acusaciones a Trump. Las revelaciones de que en enero cenó con el exjefe del FBI y le exigió lealtad, algo a lo que se negó Comey, han encendido los ánimos de la opinión pública.
Por un lado, porque se interpreta como una intromisión en la justicia, ya que Trump pidió saber si lo estaban investigando y es visto como un intento de intimidación y de desalentar y obstruir la investigación de sus lazos con Rusia. Por otro, porque el FBI es una institución independiente, que no debería estar bajo el yugo presidencial, pero al ver Trump que no contaría con su voluntad comenzó a urdir su despido.
Las ‘amenazas’ por las grabaciones avivan la polémica
Otros van más lejos y hablan de crisis constitucional y escándalo. Trump no hace nada para calmar la situación. Incluso ha insinuado que es mejor que Comey no posea grabaciones de la conversación, ante la posibilidad de que empiece a hablar con la prensa, tal y como teme Trump. El demócrata Jerrold Nadler cree que las ‘amenazas’ de Trump por las grabaciones son un caso claro de intento de obstrucción a la justicia.
John McCain, senador republicano, dijo estar “preocupado” por el despido y ha pedido investigar la concatenación de los hechos. Quiere aclarar si Trump sabía si lo estaban investigando al despedir a Comey. Pero contradiciendo a McCain, otros republicanos acusan a los demócratas de “maximizar el caso”. Desde las filas opositoras destacan la falta de unidad republicana, con algunos desmarcándose de la decisión de Trump.
“Bien puede producir un impeachment, pero estamos muy lejos de esa posibilidad”, según el senador demócrata Richard Blumenthal, prefiriendo otras vías.
Fuente: La Vanguardia