La Organización de Estados Americanos (OEA) suspendió por consenso la reunión de consulta de cancilleres sobre Venezuela ante la falta de acuerdo sobre las dos propuestas de declaración presentadas.
Los embajadores en la OEA deberán acordar ahora una fecha para otra reunión de consulta de cancilleres sobre el mismo tema a celebrarse antes de la Asamblea General de la organización, que tendrá lugar entre el 19 y el 21 de junio en Cancún.
Esta decisión se tomó después de un receso una hora y media en la sesión plenaria para tratar de consensuar los dos proyectos de declaración presentados.
La propuesta de declaración liderada por EU, México, Perú, Canadá y Panamá condenaba la Asamblea Constituyente en Venezuela y era muy crítica con el gobierno de Nicolás Maduro, mientras que la presentada por los países de la Comunidad del Caribe (Caricom) no recogía la mayoría de esas demandas.
El texto del grupo impulsor del encuentro -encabezado por países como México, EU, Perú y Canadá- pedía a Maduro «el cese» de la Asamblea Constituyente «en la forma en que está concebida actualmente», la liberación de los «presos políticos» y un calendario electoral con observación internacional.
Además, llamaba a la suspensión de «todo enjuiciamiento de civiles por tribunales militares», a iniciar un nuevo proceso de diálogo entre gobierno y oposición y «al cese inmediato de los actos de violencia» que provengan «de cualquiera de las partes».
También exhortaba al gobierno venezolano a que «busque asistencia humanitaria internacional» y le ofrecía crear «un grupo de apoyo» para proveer esa ayuda junto con los organismos especializados.
Asimismo, planteaba «establecer un grupo u otro mecanismo de facilitación para apoyar un nuevo proceso de diálogo» y «promover la implementación oportuna de los compromisos que asuman las partes».
Por otro lado, los 14 países de la Comunidad del Caribe (Caricom) presentaron un proyecto que no incluía la mayoría de las demandas del texto del grupo de Perú y México.
En lo que sí coincidían los dos proyectos es en pedir el cese de la violencia a todas las partes, un nuevo proceso de diálogo, la creación de un grupo que lo acompañe y en la invitación a Venezuela a reconsiderar su decisión de dejar la OEA.
Ninguna de estas propuestas era de consenso, lo que evidenció que era imposible redactar hoy un texto que recabara los 23 votos necesarios, es decir, los dos tercios de los 34 Estados representados (todos menos Cuba).
Fuente: Excélsior