Luis Ernesto Derbez, ex secretario de Relaciones Exteriores (SRE), dijo que México no debería tener miedo ante Donald Trump y la actitud que se tiene ante el presidente de Estados Unidos, no le afecta a México como país, sino al gobierno; lo que tenemos que entender los mexicanos es esa diferencia que es fundamental.
Reconoció que Jorge Castañeda fue el canciller que tuvo una visión clara de la relación con Estados Unidos, fue quien desnarcotizó la agenda diplomática, se sacó de la relación bilateral el narcotráfico y 10 años después se incorporó nuevamente a la agenda, «porque desafortunadamente Felipe Calderón no entiende la importancia de esta desnarcotización de la agenda y cuando entra en su ataque brutal vuelve a meterlo en la agenda».
Hoy el gobierno de Enrique Peña Nieto tiene un gran problema de cómo acabar con la delincuencia y el gobierno de Estados Unidos se aprovecha de todo esto, porque se tiene una persona como Trump, que considera a los mexicanos violadores, asesinos «al decir esto levanta el ánimo en un grupo muy pequeño de población pero que siente y vibra por eso».
Resaltó que cuando llegó como titular de la SRE, el gobierno de México se enfrentó a una locura del presidente George Bush, que en un acto de arrebato decide invadir a Irak y lo hace rompiendo todas las relaciones y violando todas las leyes internacionales y México ante eso se opuso.
«Organizamos la oposición, trabajamos con el gobierno de Chile y entre los dos países, siendo parte del Consejo de Seguridad echamos hacia atrás, una locura, de destruir la legalidad internacional y le dijimos al presidente Bush, México no puede participar en esa aventura porque va en contra de todos los cánones internacionales, cánones a los cuales México se adhiere y defenderá siempre.».
Resaltó el actual rector de la Universidad de las América de Puebla que esa determinación de nuestro país le costó el coraje de un gobierno que se voltea y dice «esto textual, yo estuve físicamente en la reunión en la que Bush le dice a Fox, o estás conmigo o estás contra mí, y la respuesta del gobierno de México fue, pues qué pena, México cree en el derecho internacional y por lo tanto no estamos contra ti, pero sí estamos en contra de que lo es violatorio de todos los cánones de derecho internacional a los cuales México se adhiere y sostiene».
En ese tiempo, se tuvo la fuerza no sólo de nuestras convicciones sino también de nuestras acciones, «lo que estamos viendo hoy es una situación complicada porque lo que vez es un país débil y lo que no podemos aceptar los mexicanos es que nos consideremos un país débil, ni lo somos económicamente hablando, ni lo somos socialmente hablando.»
Dijo que si Trump nos quita el Tratado de Libre Comercio (TLC) no se acabará la economía nacional, porque las cadenas de valor que están integradas entre México, Estados Unidos y Canadá impedirían que eso ocurra. Y lo que tenemos que decir los mexicanos es que si Trump decide salirse del TLC, que se salga y a ver qué pasa porque nos vamos a ir a las reglas de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
México es décima tercera economía del mundo, «hemos trabajado por esto, nos hemos sacrificado y lo que se tiene que pensar es cómo robustecer la economía para que haya mejores empleos para la población, yo sí estoy enojado porque no podemos vernos como que se va a colapsar el mundo no es cierto, no ocurren esas cosas».
Sobre la situación de Venezuela, el ex canciller consideró que ante la convocatoria que hizo el presidente Nicolás Maduro para una nueva constitución, México debe mantener una posición de no permitir que se destruya la democracia.