La Comisión Europea (CE) aseguró hoy que la Unión Europea deberá «hacerse cargo de su destino» pero también permanecer «abierta al mundo», tras las palabras de la canciller alemana, Angela Merkel, sobre que la UE ya no puede confiar tanto en socios y al quedar patentes desavenencias con Estados Unidos.
«Tenemos que asegurarnos de que la UE esté a cargo de su propio destino. Al mismo tiempo, la UE está abierta al mundo y siempre estará dispuesta a comprometerse», indicó hoy en la rueda de prensa diaria de la CE el portavoz jefe del Ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas, preguntado por las declaraciones de Merkel.
El portavoz recordó que el presidente de la Comisión, Jean-Claude Juncker, está a favor de «construir puentes» y que la CE «trabaja por la unidad de los 27» (cuando el Reino Unido culmine su salida de la Unión), de acuerdo a las ideas expresadas en el libro blanco presentado por la Comisión sobre el futuro de Europa.
En ese documento, se recogía «cómo podemos avanzar juntos en áreas críticas como el comercio, la defensa o la seguridad», recordó Schinas.
Por otra parte, reiteró que el encuentro de la semana pasada entre Juncker y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, con el presidente de EEUU, Donald Trump, fue «amistoso y constructivo».
Insistió en que las buenas relaciones transatlánticas seguirán siendo cruciales para la seguridad y la prosperidad globales».
«Por lo que nos concierne, seguiremos velando por ese buen nivel de relaciones transatlánticas», apostilló.
La canciller alemana llamó este domingo a los europeos a tomar su destino en sus propias manos y, un día después de finalizada la cumbre del G7, afirmó que «los tiempos en que podíamos confiar en otros han quedado atrás».
Durante la cumbre del G7 y la cumbre de la OTAN salieron a relucir las diferencias que existen actualmente con el Gobierno de Trump, especialmente en áreas como comercio o clima.
Preguntado por el gasto militar de los europeos, que EEUU reclama incrementar, Schinas recordó que la UE no participa como institución en la OTAN, cuyos miembros sí que se han comprometido a invertir el 2 % de su PIB en Defensa para 2024 y agregó que «la contribución de los europeos a la Defensa es una prioridad».
En ese contexto, la Comisión publicará a primeros de junio un documento de reflexión sobre el sector mientras que Juncker considera que la aportación de la UE a la Defensa debe verse «más allá del debate del 2 %», teniendo en cuenta que es el primer donante de ayuda humanitaria del mundo o que dedica recursos a la atención de refugiados en Turquía o Jordania, lo cual contribuye también a «la estabilidad y la paz mundial».
Fuente: Terra