Diego Fernández de Cevallos consideró que hoy en México, antes del día de la votación, nada es para nadie porque las encuestas -de alguna manera sean bien hechas o sean mal hechas y por lo tanto de mala fe- muchas veces han fallado.

Cuando se dan márgenes muy grandes, como -por ejemplo- en Nayarit, puede haber cierto grado de confianza de que gane el de Acción Nacional, el candidato del PAN; pero ya veremos la noche del próximo domingo cómo se pintan los colores en los estados de Coahuila, de Nayarit, del Estado de México, de Veracruz, lo cual nos permitirá imaginar -sólo imaginar- algún posible resultado en el 2018.

Añadió que hoy, en las elecciones lo más importante no es quedarnos en el agravio, en el insulto, en la diatriba que ha prevalecido. Tenemos que buscar que esa reserva moral de los electores les lleve a ser nada más  responsables del destino de sus estados y de alguna manera del destino del país.