El Palacio donde se celebra el festival de Cannes ha sido desalojado durante varios minutos por la policía, debido a una «mochila sospechosa» hallada en la sala Debuchy. Justo allí se iba a celebrar a las 19.30 la proyección de Redoubtable, nuevo filme de Michel Hazanavicius sobre Jean-Luc Godard, que quedó suspendida. Finalmente, el director del festival, Thierry Frémaux, informó desde las propias escaleras del edificio de que la actividad podía volver a la normalidad, ya que se había tratado de una «falsa alarma».
Mientras, la sede principal del certamen había sido evacuada, salvo su mayor sala, la Lumiére, donde se estaba proyectando 120 pulsaciones por minuto, de Robin Campillo. El propio Frémaux también se quedó en el interior del edificio, durante el desalojo, mientras los agentes llevaban a cabo su control.
El certamen cuenta con unos 4.000 acreditados, entre periodistas y representantes del mundo del cine que participan tanto en el festival como en su mercado, el más importante del mundo para la compraventa de películas. La organización ha reforzado las medidas de seguridad para esta edición, la 70ª del festival, frente a la amenaza de posibles ataques terroristas. Por primera vez, hay patrullas con revólveres. controlando la sede del certamen y sus alrededores.
Fuente: El País