Niños, adolescentes y mujeres son los grupos entre los que está creciendo más la adicción al tabaco, y a pesar de todos los esfuerzos en la materia, la prevalencia de esta adicción sigue aumentando de 15.9 al 16.4 por ciento en nuestro país, informó Jorge Salas Hernández, director general del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias Ismael Cosío Villegas.
Por ello, los directores de los Institutos Nacionales de Salud firmaron una declaración en la que llaman a profundizar el alcance de las políticas públicas con cambios en la Ley General de Salud para el Control del tabaco, y al Poder Ejecutivo a promover mecanismos de cumplimiento de la ley con penalizaciones aplicación de lo dispuesto en dicha materia. “El tabaquismo es un grave problema de salud pública con una incidencia creciente en niños, adolescentes y mujeres que provoca un gran número de muerte, dolor y sufrimiento innecesarios. Provoca alteraciones en la salud y tienen un gran impacto social. Un paciente que ha desarrollado dependencia a la nicotina requiere de cuidado profesional”.
El doctor Salas afirmó que estamos viviendo un momento crucial y, si se aprovecha adecuadamente, constituirá un hito en el control del tabaco y se puede lograr que generaciones futuras vivan en un mundo más sano.
El tabaco mata más personas en e l mundo que el alcohol y todas las drogas ilícitas juntas.
“Hoy, los directores de los Institutos Nacionales de Salud y hospitales federales firmaron una declaración en la que se comprometen a que sus instituciones sean zonas libres de humo de tabaco. Extienden esta medida a escuelas y facultades de educación media y superior, así como trabajar con profesores de educación básica”.
Otra medida es apoyar y dar facilidades al personal de salud y administrativo para que dejen de fumar y lo compartan entre familiares y vecinos. Si son adictos a la nicotina, ayudarlos a que en sus recaídas cuenten con herramientas y apoyo para superarlas.
“También trabajaremos en sensibilizar a los médicos y otro personal de salud para que tengan claro que los pacientes que sufren de adicción a la nicotina requieren de su ayuda profesional y capacitarlos para que puedan tratarlos de acuerdo con los mejores estándares disponibles. Es importante informarles que su adicción no los afecta solamente a ellos, sino también a sus familias, si están expuestos al humo y sufren también por esta adicción”.
Los directores también llamaron a promover campañas de promoción y de estilos de vida saludables para la prevención del uso del tabaco, y llamaron a que las instituciones del sistema federal, independientemente de cuál sea su especialidad, sepan detectar temprana y oportunamente esta adicción como para que dejen de fumar o acudan a recibir tratamiento a los hospitales adecuados.
Salas alertó sobre el gran riesgo de caer en esta adicción, ya que a pesar de los altos impuestos y los avisos en las cajetillas, va en aumento la venta de cigarrillos sueltos, disponibles en cualquier tienda y aun en la vía pública.
“Es un gran problema que le cuesta muchísimo dinero al Estado, a las familias –esta adicción puede llegar a costar 1,500 pesos al mes si consume una cajetilla diario; a veces fuman más o varios miembros de la familia tienen la adicción.
El médico explicó que no se trata sólo de problemas respiratorios o de cáncer de pulmón, que es lo más usado en las campañas,“también provoca afecciones cardiovasculares, fatiga e incapacidad para realizar actividades cotidianas. La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) ocasiona, además, una calidad de vida pésima y una cronicidad que puede durar muchos años. Así, es un factor importantísimo para la muerte por infartos agudos a miocardio y enfisema, que cuestan muchos recursos para su atención y, desafortunadamente, al final terminan en una muerte dolorosa o prematura”.
Por ello, el Plan de Acción Mundial para la Prevención y Control de las Enfermedades no Trasmisibles 2013-2020, impulsado por la OMS, llama a reducir la prevalencia 30 por ciento en el consumo de tabaco.
“Si México quiere alcanzar ese objetivo deberá disminuir su prevalencia de 16.4 a 11. 4 porciento en los próximos 8 años. Es preocupante que sea entre niños y jóvenes, además de las mujeres, donde está aumentando la tendencia a la adicción por tabaco. En los niños y jóvenes está comprobado que el tabaco abre la puerta, además, al uso de otras sustancias adictivas, como el alcohol y otras drogas ilícitas. Por eso debemos hacer énfasis en campañas dirigidas a esto grupos de edad que son además de muy vulnerables al fenómeno adictivo y quienes resultan con daños muy tempranos en su organismo. Debemos alertar que el tabaquismo es un grave problema de todas las edades, y que aun en edad avanzada se obtienen beneficios al interrumpir su consumo”.
Fuente: Crónica