En los últimos tres años ha aumentado de forma considerable el uso de niños para cometer actos terroristas en el mundo, como los 117 infantes en la cuenca del lago Chad, destaca un informe de UNICEF.
La milicia terrorista radical islámica Boko Haram utiliza cada vez más niños como atacantes suicidas en los países en torno al lago Chad, que comprende partes de Nigeria, Níger, Chad y Camerún, informó el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
La cifra se triplicó en el primer trimestre del año en comparación al mismo periodo del año anterior, hasta llegar a 27.
En los primeros meses de este año, el número de menores de edad utilizados en ataques con bomba es casi el mismo que durante todo 2016. Es el peor uso posible de niños en conflicto», declaró Marie-Pierre Poirier, directora regional de UNICEF para África Occidental y Central.
Como consecuencia, niños y niñas son observados con creciente temor en mercados y puntos de control ya que podrían estar relacionados con Boko Haram.
Algunos de los infantes son drogados y obligados a participar en los ataques suicidas de la milicia islamista Boko Haram, que no da tregua a la población civil en su intento de instaurar el Estado Islámico en Nigeria.
Boko Haram hace uso de niñas secuestradas y mujeres en sus atentados debido a que levantan menos sospechas y elevan la conmoción de la comunidad internacional.
Este informe se produce casi tres años después de que Boko Haram secuestró a 276 niñas nigerianas de una escuela en la localidad de Chibok, en el noreste del país, el 16 de abril de 2014. Desde 2009 al menos 14 mil personas murieron a manos de los fundamentalistas suníes en Nigeria, Chad, Camerún y Níger.
Datos de Naciones Unidas señalan que alrededor de 2.7 millones de personas de la región huyeron de sus hogares a causa de Boko Haram. El objetivo del grupo es establecer un Estado en la región donde rija una estricta interpretación de la ley islámica, la sharia.
Fuente: Radio Fórmula