Los presidentes estadunidense, Donald Trump, y chino, Xi Jinping, se reunieron en la residencia privada del magnate neoyorquino en Palm Beach, Mar-a-Lago, como parte de una serie de juntas que sostendrán desde hoy y hasta el viernes.
Trump ha previsto estas reuniones como difíciles pues el país no se puede permitir «déficits comerciales masivos».
Antes de viajar hacia Florida, Trump insistió en que China no ha sido «justa» con EU en materia comercial durante «muchos años», lo que se ha traducido en un déficit comercial estadunidense con el gigante asiático de 347 mil 37 millones de dólares en 2016.
Se espera que durante las cerca de 24 horas que durará el encuentro entre ambos líderes mundiales el estadunidense planteará un mayor «equilibrio» en la balanza comercial con China, así como las amenazas de Corea del Norte, que este mismo miércoles lanzó un nuevo misil balístico de medio alcance.
El líder estadunidense afirmó este domingo, en una entrevista con el diario Financial Times, que está «totalmente» dispuesto a actuar unilateralmente frente a las amenazas de Pyonyang, al asegurar que «si China no va a resolver (el problema de) Corea del Norte, nosotros lo haremos».
Esta noche, Trump y la primera dama estadunidense, Melania, serán los anfitriones de una cena en honor de Xi y su esposa, Peng Liyuan, aunque la parte formal de la visita tendrá lugar mañana viernes, cuando se celebren una serie de reuniones que concluirán con un almuerzo de trabajo.
Fuente: Excélsior