POR LA ESPIRALClaudia Luna Palencia
Desde hace más de una década atrás, Francisco González, inició el camino de una fuerte apuesta en pro de la digitalización de los procesos financieros que la institución ofrece a millones de clientes así como de los mecanismos internos de gestión de los mismos.
Al parecer llegado el 2020 esta silenciosa transformación interna empezará a brindar sus frutos con múltiples beneficios y ventajas para la institución que en España es la segunda por activos –después del BSCH-, no obstante, la primera en México.
La magna Revolución Digital provocada por el acelerador tecnológico está trastocando todo el orden de nuestro diario vivir, es imposible que la Banca tal y como la hemos conocido desde siempre evite dicha evolución quedándose fosilizada en el pasado; es más su statu quo pende del hilo de su capacidad de readaptación y modernización ante la neorealidad.
Máxime cuando el futuro ya no es cuestión de un largo tiempo debido al incesante ritmo de la sucesión de cambios, el futuro es pasado mañana; bajo esa premisa nos hemos convertido en seres endebles interrelacionados a fuerza de una comunicación adictiva. Estamos a nada de manejar el orden de las cosas de nuestra vida a golpe de un click o de una orden de voz en el móvil.
González, como buen gallego, es todo un visionario quizá el banquero con la mayor chispa para tomar la cresta de la ola asumiendo riesgos y quien no lo haga para posicionarse en el universo de la red me parece que caerá en el ostracismo.
De acuerdo con BBVA Research en 2015 la banca europea invirtió más de 60 mil millones de dólares en plataformas y estrategias tecnológicas, la institución española a la que hago referencia en esta columna les lleva cinco zancadas a la mayoría.
Según Ditrendia, en 2020 habrá más de 50 mil millones de dispositivos (de todo tipo) conectados en el mundo y ya hoy en día hay 7.9 mil millones de dispositivos móviles a nivel global superando al número de personas que conforman la población de 7.4 mil millones de seres humanos.
Aunque cabe recalcar que dicha relación no es ningún síntoma revelador de que existe un móvil por ser humano mucho menos cuando la enorme brecha digital todavía sigue siendo un lastre en el mundo subdesarrollado y tampoco obviemos que un buen número de pueblos, comunidades y comarcas siguen olvidados del Internet en países industrializados.
De hecho, la idea de Mark Zuckerberg, de llevar Internet a los olvidados digitales a través de Aquila, un dron solar que recorre el planeta buscando los lugares habitados pero más alejados casi inhóspitos es apenas un hito de todo cuanto hace falta porque verdaderamente no quede ninguna persona incomunicada y mucho menos crezca siendo una analfabeta digital que es el doble riesgo de la discriminación a la que nos enfrentamos en plenitud del amanecer del siglo XXI.
La propia ONU avala que más de la mitad de la población sigue apartada de este nuevo universo y así es muy complicado sumarla a toda las cosas buenas que allí se encuentran porque no todo es negativo aunque partimos de los riesgos intrínsecos de una sociedad que habla cada vez menos y navega cada vez más.
A COLACIÓN
La banca digital, todos sus procesos son un enorme desafío pero una impronta porque la gente quiere facilidades y también que el costo por los servicios reduzca: menos papel y más eficiencia; menos gestiones menos burocracia, más rapidez y menores costos para el consumidor digital.
Al respecto Ditrendia revela por ejemplo que en España hay 50.8 millones de teléfonos móviles, también superan a la población ibérica; los españoles cada vez hacen más procesos de compra por la red muchos con sus smartphones el teléfono preferido de hecho, la consultora especializada en marketing, revela que a partir de los 10 años de edad muchos niños ya cuentan con un aparato y muchas veces es de última generación.
España sigue la tendencia de Europa en la que 78 de cada 100 habitantes tienen un móvil inteligente e insisto la gente va perdiendo el miedo para comprar con él: desde entradas de cine, espectáculos, ropa, moda, libros, gadgets, hasta ordenar la lista del supermercado, billetes de avión, hoteles y más ocio.
La idea es ahora bancarizar digitalmente hablando a todos los usuarios de móviles que hagan sus operaciones sin necesidad de ir físicamente a una sucursal de su entidad financiera.
“BBVA lidera la banca móvil con 7 millones de usuarios en junio de 2015, seguido del Banco Santander con 5.5 millones, CaixaBank con 2.6 millones e ING Direct con un millón en España”.
Por cierto que Francisco González consciente de que los tentáculos de BBVA están muy posicionados en México y Brasil, también lleva años invirtiendo dinero en dichos países para readecuar sus plataformas y procesos; el mes pasado, el mandamás del BBVA viajó a México para anunciar una inversión de 1 mil 500 millones de dólares (en años anteriores la institución ha destinado 3 mil 500 millones de dólares) igualmente para todo el proceso de digitalización tecnológica pero esta vez en el país azteca.