¿Por qué una buena parte de los veracruzanos pensamos que las detenciones de duartistas están calendarizadas? La respuesta es sencilla: porque sí lo están. Cualquier estrategia político-mediática tiene fechas perentorias, sería ingenuo creer que aquí no las hubiera.
En este momento duermen bajo el mismo techo penitenciario tres ex funcionarios duartistas: el de Seguridad, Arturo Bermúdez Zurita; Finanzas, Mauricio Audirac Murillo, y el del Agua, Francisco Valencia. Falta el ex Gobernador Interino, Flavino Ríos Alvarado, quien por motivos de salud continúa «preso», pero en un hospital.
La Fiscalía General del Estado investiga a cuando menos 300 duartistas por diferentes delitos, aunque la mayoría de ellos se sabe son peculado, abuso de autoridad, tráfico de influencias, incumplimiento de un deber legal, y el que sin duda habrá de ser muy mencionado en lo subsecuente: coalición.
¿Cuántos de esos 300 investigados son auténticos «nombres grandes»?, ¿qué número y quiénes de ellos atraerían la atención de los medios nacionales, descontando el lógico interés de los estatales? Las detenciones «boom», en estrategia política, por muy maquiavélico que suene, deben calendarizarse, y en Veracruz, seguro lo están.
En un escenario positivo para el Gobierno de Miguel Ángel Yunes, con 5 «peces gordos» en ese universo de 300 investigados, aunado a los duartistas que ya tiene encerrados, podrían reforzar la estrategia electoral con miras al próximo 4 de junio, y de ahí, a la renovación de la Gubernatura, en el 2018.
Lo más mediático para la Fiscalía Estatal y el Gobierno actual consistiría en desaforar a algún diputado duartista, y posteriormente, aplicarle cuando menos el ya «acostumbrado» año de prisión preventiva. A la distancia se ve complicado que ocurra, más no podemos descartarlo.
Si el Gobierno de Yunes Linares cuenta con 5 nombres «pesados» y detiene a uno cada 60 días, tendría el rebote mediático justo para cubrir cuando menos 10 meses de su administración; tiempo suficiente para abrir el mensaje de su primer informe de labores con «bombo y platillo», cortesía de los duartistas… y claro, si en esos meses capturaran el prófugo más buscado, se daría mayor «vuelo» del acostumbrado mencionando su nombre.
Twitter: @aaguirre_g