Con el fin de mejorar la atención que la policía brinda a la ciudadanía durante manifestaciones y reuniones, la Secretaría de Seguridad Pública capitalina actualizó su protocolo de actuación.
En la Gaceta Oficial dio a conocer el Protocolo de Actuación Policial de la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México para la Protección de Personas en el Contexto de Manifestaciones o Reuniones, que entrará en vigor mañana.
Atiende las recomendaciones de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, que pidió analizar el protocolo toda vez que se acreditó la violación a los derechos de seguridad ciudadana; a la libertad, seguridad e integridad personales; a la manifestación y a la protesta.
Además de los derechos a la libertad de expresión y de reunión, de defender los derechos humanos, al principio de legalidad y seguridad jurídica, así como al libre ejercicio periodístico y al debido proceso.
El documento establece los principios técnicos de operación para la ejecución de acciones, como evaluar en forma permanente los riesgos durante la planeación, preparación, ejecución y finalización de la operación, y verificar que el personal operativo cuente con el equipamiento necesario de acuerdo con el servicio encomendado.
También activar los servicios de emergencia para la evacuación y traslado de posibles lesionados; determinar las situaciones especiales y necesidades logísticas para su intervención, y que el personal policial tenga conocimiento de las disposiciones para garantizar los derechos humanos de las personas en el contexto de manifestaciones.
Así como aplicar estrategias con perspectiva de género diferenciadas y ajustes razonables necesarios sobre la participación de grupos en situación de vulnerabilidad, de acuerdo con el principio de igualdad y no discriminación.
La Subsecretaría de Desarrollo Institucional se encargará de diseñar e instrumentar la estrategia de capacitación, adiestramiento y actualización dirigidos a la Policía de la Ciudad de México, necesarios para la implementación de este protocolo.
Fuente: Excélsior