Colaboración de Francisco Fonseca Notario
El Reino de los Países Bajos consta del territorio continental de los Países Bajos y las islas en el Caribe llamadas Antillas Neerlandesas y Aruba. Junto al nombre oficial de Países Bajos, se suele utilizar mucho la denominación Holanda. El nombre de «Holanda» se deriva de la palabra «holtland», que significa «país de la madera».
En las últimas semanas, Holanda llamó la atención del mundo cuando celebró elecciones parlamentarias con resultado favorable al partido del primer ministro Mark Rutte, de tendencia liberal.
Los Países Bajos tienen una monarquía constitucional con un sistema parlamentario de gobierno. La monarquía tiene la jefatura del Estado y sus políticas liberales han llamado la atención mundial.
La política de su gobierno se caracteriza por querer alcanzar un amplio consenso en decisiones importantes, dentro de la comunidad política y de la sociedad en su totalidad, donde la opinión de todos los ciudadanos se vea reflejada y tenida en cuenta a la hora de llevar a cabo iniciativas y nuevos proyectos.
Holanda es de los Estados pioneros en el mundo a la hora de realizar cambios que marcan y diferencian el país respecto de otros. Es el caso de permitir con ello la entrada de nuevas maneras de convivencia social tales como el matrimonio entre personas del mismo sexo, la prostitución controlada y segura, la clonación, la eutanasia y el uso de drogas permitidas exclusivamente en cafés y locales adaptados y que tienen una licencia aprobada.
El rey Guillermo Alejandro de los Países Bajos (Willem-Alexander Claus George Ferdinand van Oranje-Nassau, nacido en Utrecht en 1967) es el actual monarca neerlandés desde el 30 de abril de 2013 cuando su madre, la reina Beatriz, abdicó la Corona y retomó el título de princesa de los Países Bajos.
El sistema parlamentario destaca a un Primer Ministro quien es el presidente del Consejo de Ministros y el jefe del gobierno de los Países Bajos. Funciona como la “cara” del Gabinete y generalmente es también ministro de Asuntos Generales. El cargo se estableció oficialmente en 1845.
El primer ministro es el jefe del partido o coalición mayoritaria en la Cámara baja del Parlamento y es un miembro del Consejo de Ministros. Mark Rutte (n. 1967), del Partido Popular por la Libertad y la Democracia ejerce este cargo en la actualidad.
La política en Holanda se ejerce a través de sus once institutos políticos, siendo los principales partidos: Convocatoria Demócrata-Cristiana (CDA, demócrata cristiano), Partido Laborista (social-demócrata, afiliado a la Internacional Socialista); Partido Popular por la Libertad y la Democracia (PPLD, liberal conservador) y el Partido Socialista.
En las elecciones habidas el pasado 15 de marzo, el partido del primer ministro de Holanda, Mark Rutte, logró la victoria con 33 de los 150 escaños elegibles.
El partido de Geert Wilders (PVV) solo obtuvo 20 escaños, frente a los más de 25 que le otorgaban la mayoría de encuestas. El partido ecologista (GroenLinks) multiplicó por cuatro su actual representación y logró el mejor resultado de su historia.
Los socialdemócratas (PvdA), socios minoritarios en la actual coalición de gobierno, sufrieron un revés al perder 28 escaños (de 38 a 10). Con estos resultados, será necesaria una coalición de al menos cuatro partidos para poder formar gobierno. La participación electoral ha sido de 82 por ciento, la más alta desde 1986.
La sorpresa fue que el gran perdedor en las urnas fue el PVV (Partido de la Libertad) del agitador ultraderechista, islamófobo y eurófobo Geert Wilders, de 53 años. Wilders logró 19 escaños en el Parlamento de 150 curules, al igual que otras dos agrupaciones.
Como he mencionado párrafos arriba y como era previsible, Wilders es el gran marginado de esta próxima legislatura. Su Partido de la Libertad (PVV) tiene un millón 300 mil votantes y por eso, el populista holandés considera que se merece un puesto en el futuro gobierno.
Tendió la mano a los liberales y democristianos para entablar una conversación, pero los líderes de ambos partidos no dudaron en su respuesta: «No vamos a sentarnos a la mesa con el PVV». Ya no solo es cuestión ideológica, dicen, sino de falta de confianza en el compromiso de Wilders, que dejó caer al gobierno de Rutte en 2012, al negarse a apoyar todas las medidas de austeridad durante la crisis económica.
Estas elecciones fueron la anticipación a las instituciones europeas después de que Gran Bretaña saliera (brexit) de la Comunidad Europea el año pasado y para hacer un frente a las recientes elecciones en Estados Unidos.
Los comicios en Holanda también son un aviso para las elecciones en Francia del próximo mes de mayo y para la política de la canciller alemana Ángela Merkel.