Bailar es una de las actividades más divertidas que podemos hacer con amigos, la pareja o hasta solos, pues nos ayuda a relajarnos y nos inyecta mucha energía con tan sólo escuchar la música.
Es tanto el poder del baile que también se utiliza para seducir e incluso para perder peso, pero ¿sabías que también es efectivo para tener buena salud mental?
Un estudio de la Escuela de Educación y Desarrollo Humano de la Universidad de Miami (UM), afirma que tanto el baile aeróbico como el de salón, puede mejorar la capacidad mental, sobre todo en adultos entre los 40 y 80 años, debido al aprendizaje de nuevos movimientos.
El estudio. Cerca de 40 voluntarios fueron examinados en su funcionamiento mental, tanto en una computadora como utilizando una prueba de movimiento en un entorno físico al principio y al final del estudio.
Los investigadores encontraron en el estudio que ambos grupos mejoraron el funcionamiento mental.
Las conclusiones. Michela Laureti, de Arthur Murray Ballroom Studio, explicó que los beneficios mentales del baile de salón provienen del proceso de aprendizaje de nuevos pasos, así como el trabajo con compañeros.
Se cree que la danza aeróbica mejora el flujo sanguíneo y el suministro de oxígeno al cerebro, y los bailarines aeróbicos también podrían haber tenido que prestar atención a los movimientos que cambian rápidamente.
Sean Nicolle, doctor en Fisiología del Ejercicio de UM, quien dirigió el estudio para su tesis doctoral, explicó que el objetivo no era sólo observar qué tipo de baile mejora la función mental, sino comprender cómo funcionan el cerebro y la mente.
“El cerebro se adapta de manera específica a lo que se le exige. No tiene que ser el baile. Todo con una demanda mental hará que el cerebro se adapte. Los beneficios mentales de las clases de baile son probablemente diferentes de los de los escaladores”, señaló.
“Esperábamos que las clases de baile mejoraran las funciones mentales relacionadas con el ritmo y la coordinación, mientras que aprender algo como escalar probablemente desafiaría al cerebro a mejorar las funciones mentales relacionadas con la anticipación, la planificación y la resolución de problemas”, concluye Nicolle.
Fuente: Staff