El gobernador del Banco de México (Banxico), Agustín Carstens, aseveró que el crecimiento de 2.3 por ciento de la economía mexicana en 2016 es un buen dato con respecto a lo que se esperaba hace unas semanas, pero se debe continuar con el proceso de reformas estructurales.
Hubo un crecimiento vigoroso en el cuarto trimestre del año pasado, «aunque es una cifra baja si se ve desde el punto de vista de las expectativas al inicio de 2016, la realidad es que el entorno externo ha seguido siendo complicado y esta cifra es alentadora», destacó.
Sin embargo, dijo, también resalta la necesidad de que sigamos insistiendo en las reformas estructurales, «de forma tal que esta tasa de crecimiento se pueda preservar y acelerar hacia el futuro».
En entrevista con Notimex, el banquero central -quien la semana pasada anunció que permanecerá en el cargo como gobernador de Banxico hasta el 30 de noviembre- resaltó que entre los riesgos para la economía mexicana este año está el escenario internacional.
Un tema muy importante va a ser que se establezcan bases sólidas para una relación bilateral constructiva con Estados Unidos, por eso celebro que haya reuniones de alto nivel con funcionarios del vecino país del norte», apuntó.
Carstens señaló que también hay retos desde el punto de vista de la política monetaria, pues la Reserva Federal de Estados Unidos podría subir las tasas de interés, además de que «no caigamos en un proteccionismo extremo, que eso limitaría el crecimiento hacia adelante».
Sobre la inflación, destacó que en enero hubo un aumento importante, resultado del ajuste en los precios de los energéticos y el tipo de cambio, “se va a mantener este año por arriba de la meta del 4.0 por ciento, pero hacia finales debería iniciar una trayectoria sostenida hacia la baja”.
Señaló que las cifras de febrero de inflación deberán presentar variaciones mucho más bajas, “lo que quiere decir que en el margen, la inflación ya está tomando un comportamiento más estable y normal dentro de lo que habíamos venido observando en los últimos años”.
El gobernador del Banco de México señaló también que la liberación del precio de las gasolinas es una buena medida para consolidar la fortaleza fiscal, “es una reforma muy importante” que permitirá que se desarrolle ese sector.
Esperemos que los precios internacionales de la gasolina y el tipo de cambio ayuden a que los precios de este energético ya no sean motivo de preocupación”, finalizó.
Fuente Crónica