Un rehén fue encontrado muerto este jueves luego que fuerzas especiales de la policía irrumpieron esta mañana en una prisión de Delaware que había sido escenario de un motín por un grupo de reos que demandaban un trato más humanitario.
Un oficial correccional fue identificado como la persona que murió en el incidente, aunque aún se desconocen las circunstancias del deceso, de acuerdo con el Departamento de Correcciones.
El motín sucedió en el Edificio C del complejo penitenciario, que alberga entre 120 y 150 presos.
Tras la muerte del oficial, el gobernador de Delaware, John Carney dijo que la prioridad es determinar qué pasó y cómo. En un comunicado difundido esta mañana, Carney señaló que “harán los cambios necesarios para asegurar que nada como esto ocurra de nuevo.”
Los presos tomaron a los cuatro trabajadores como rehenes el miércoles por la mañana, lo que provocó el cierre de todas las prisiones de Delaware.
El gobernador Carney indicó que la muerte del oficial correccional es un trágico recordatorio de que los agentes de la ley arriesgan sus vidas todos los días.
Los presos amotinados liberaron este miércoles por la noche a dos empleados y más de dos docenas de reos en el penal James T. Vaughn en Smyrna. Las autoridades dijeron desconocer si los presos habían sido retenidos contra su voluntad.
Los presos se pusieron en contacto con un periódico en dos llamadas telefónicas para explicar sus motivos, enumeran el gobierno en Estados Unidos, las oportunidades educativas, la rehabilitación y cómo se gasta el dinero que gasta el estado en las prisiones.
Los reos contactaron con The News Journal en Wilmington con ayuda de la prometida de un preso y de la madre de otra persona. La madre dijo al diario que su hijo estaba entre los rehenes.
Fuente: Staff