Perú colocó hoy al expresidente Alejandro Toledo en la lista de delincuentes más buscados del Ministerio del Interior y lanzó una recompensa de 100.000 soles (unos 30.000 dólares) para cualquier información que conduzca a su localización y captura, informaron las autoridades.
El ministro del Interior, Carlos Basombrío, fue el encargado de anunciar esta recompensa después de que anoche un juez pidiera la busca y captura internacional del exmandatario por tráfico de influencias y lavado de activos, así como su prisión preventiva por 18 meses.
“El Ministerio del Interior puso ya la alerta roja y la oferta de recompensa por 100.000 soles, la más fuerte que hemos puesto desde que estamos en el gobierno, para cualquier persona de cualquier país del mundo que nos de información sobre donde se encuentra Toledo”, indicó el ministro en declaraciones al Canal N de la televisión peruana.
El ministro indicó que la voluntad es “ubicar hoy” al expresidente, quien se encuentra fuera del país, supuestamente en Francia, y que no ha dado muestras de que regresará desde que el pasado viernes se difundiera que los responsables de la constructora brasileña Odebrecht habrían confesado que pagaron 20 millones de dólares a Toledo para que facilitara sus negocios.
En ese sentido, Basombrío indicó que la alerta roja peruana ya fue trasladada a Interpol Francia, en donde ya se está evaluando el pedido.
“Desde anoche hasta ahora hay gestiones para que dada la gravedad del caso se avance en este pedido. Ahora se depende de la rapidez de Interpol Francia.(…). Hemos exigido que la alerta roja internacional se active a la mayor brevedad posible”, añadió.
Según informa la página web de la Comisión Evaluadora de Recompensas contra la Criminalidad, la recompensa se dará a “las personas que proporcionen información oportuna y veraz que conlleve a la ubicación exacta y captura del expresidente“.
La ficha con la foto, los delitos de los que se le acusa y la recompensa ya se encuentra en la página web del Ministerio junto a la de otros criminales prófugos.
Un juez consideró que existen evidencias suficientes para pedir la captura de Toledo por supuestamente haber favorecido a Odebrecht en la licitación de la Carretera Interoceánica del Sur a cambio de jugosas dádivas, depositadas en un entramado de empresas “offshore”.
“No es un ciudadano cualquiera. Fue presidente de la República, y valiéndose de la más alta investidura del país, habría hecho todos estos actos corruptos para enriquecerse ilícitamente”, aseguró el juez Richard Concepción, titular del Primer Juzgado de Investigación Preparatoria de la Sala Penal Nacional a cargo de este caso.
Según dijo el juez, Toledo no tiene arraigo en el Perú, ya que pasa la mayor parte de su tiempo fuera del país, pues trabaja como investigador en la Universidad de Stanford (EE.UU.).
Toledo es la primera gran figura de la política peruana inculpada por el caso Odebrecht, cuyos responsables confesaron a la Justicia estadounidense haber pagado 29 millones de dólares a funcionarios de Perú entre los años 2005 y 2014.
Ese período comprende los Gobiernos de Alejandro Toledo (2001-2006), Alan García (2006-2011) y Ollanta Humala (2011-2016).
Fuente: 24 Horas