Calificar una línea frontal defensiva siempre será complicado. Sus aciertos pueden desaparecer con una mala actuación de los linebackers o de los profundos; son, además, los jugadores con más lesiones en cada temporada debido a la exigencia de la posición, por lo que siempre es complicado contar con un grupo de forma consistente.
Las defensivas de Nueva Inglaterra y de Atlanta tuvieron números muy diferentes. Mientras los Pats contaron con una de las mejores de la NFL, la de los Halcones es su talón de Aquiles.
La defensa de los Patriotas es de lo mejor que puede haber en contra del ataque terrestre. Los alas Chris Long y Trey Flowers, así como los tacles Alan Branch y Malcolm Brown están en el top 3 contra de la carrera. Sus 34 capturas son también una buena muestra de lo eficientes que también pueden ser para presionar al quarterback en jugadas contra el pase.
Del otro lado, la defensa de Atlanta fue la 27 de la NFL en puntos recibidos en contra. Los Halcones cuentan con uno de los mejores ataques, y si la defensa permite 30 puntos, la ofensiva es capaz más.
Pero llegarán al Super Bowl con el antecedente de una buena exhibición en el Juego de Campeonato de la Conferencia Nacional, en el que contuvieron a uno de los mejores pasadores de la liga como Aaron Rodgers.
Los linieros, Brooks Reed y Tyson Jackson, y las alas, Jonathan Babineaux y Grady Jarrett, limitaron al ataque terrestre de Green Bay a 99 yardas y sumaron dos capturas de quarterback en la victoria que les dio su pase al Super Bowl; otra ventaja puede ser contar con Dan Quinn como entrenador, siendo un especialista defensivo.
Fuente: Excélsior
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