El presidente Donald Trump arremetió nuevamente contra la justicia, denunciando tribunales «politizados» y acusando a los jueces que evalúan su decreto anti migratorio, de momento suspendido, de poner en riesgo la seguridad de Estados Unidos.
A la espera que tres jueces de una corte federal de apelaciones de San Francisco se pronuncien este semana sobre la orden presidencial que prohibió la entrada al país a inmigrantes y refugiados de siete países musulmanes, Trump aumentó el tenor de su conflicto con la rama judicial.
«Jamás quiero decir que un tribunal es parcial, por lo tanto no voy a decir que es parcial y aún no tenemos una decisión. Pero los tribunales parecen estar muy politizados», dijo el presidente republicano en una reunión en Washington con la asociación de comisarios policiales.
Ante un auditorio mayoritariamente cautivo, Trump expresó «estupefacción» respecto a las preguntas hechas sobre su polémico decreto por los jueces durante una audiencia telefónica el martes, señalando que lo que escuchó fue «vergonzoso».
Tras leer a la audiencia un artículo de una ley adoptada hace 65 años, que faculta al presidente cerrar las fronteras a una categoría de ciudadanos extranjeros que considere van «en detrimento de los intereses de Estados Unidos», el mandatario señaló que hasta «un mal estudiante de secundaria» estaría de acuerdo con su interpretación de la norma.
Los jueces no examinan la constitucionalidad del decreto como tal sino solo si debe permanecer en pie mientras la justicia examina el fondo del asunto.
Fuente: Milenio