La Secretaría de Turismo del Estado de Baja California anunció que, tras el desabasto de gasolina registrado ayer en la zona norte del Estado, la mayoría de las estaciones gasolineras en Tijuana y Rosarito se encuentran ya abiertas al público y listas para ofrecer servicio a los usuarios.
Informó que las autoridades locales, junto con la sociedad civil, han establecido un diálogo para que quienes deseen llevar a cabo algún tipo de manifestación lo hagan de manera libre pero pacífica, no causando afectaciones a los ciudadanos o turistas de la entidad, por lo que la industria turística del Estado se encuentra operando de forma cotidiana.
Tanto el aeropuerto como los accesos terrestres en la frontera y las empresas o establecimientos turísticos operan con absoluta normalidad, teniendo así los visitantes a nuestro Estado todas las garantías habituales, añadió en un comunicado la dependencia local.
En dos bloqueos a plantas de Almacenamiento y Distribución de Petróleos Mexicanos, uno en Rosarito, Baja California, y otro en la capital de Durango, fueron aplicados sendos operativos de las fuerzas federales para desalojar a quienes protestaban contra el alza a las gasolinas.
El operativo de Rosarito, sin embargo, encontró resistencia de los manifestantes, que desde el lunes 2 de enero tienen cercadas las instalaciones de Pemex, que repelieron a policías y militares.
El saldo fue de 70 detenidos y casi una decena de lesionados, entre quienes se encuentran policías federales que fueron arrollados por el conductor de un vehículo de una empresa refaccionaria.
Circula en redes un video en el que se aprecia cuando uno de los manifestantes embiste con su carro a un grupo de policías antimotines.
Entre los heridos están al menos tres periodistas tijuanenses. El jueves se dio un primer desalojo, cuando un centenar de policías federales, municipales y militares desalojaron a una veintena de manifestantes; ayer la cifra de inconformes ascendía a unas 300 personas, que enfrentaron a los uniformados.
Luego de tres intentos de desalojo se logró liberar los caminos de acceso a la planta, pero cerca de 200 personas volvieron al sitio del desalojo y siguen bloqueando la planta.
En Durango, tras cinco días de plantón, la madrugada de ayer fuerzas especiales de la Policía Federal y agentes estatales desalojaron a manifestantes de la planta de Pemex.
La Fiscalía estatal informó en un comunicado que el saldo fue de tres detenidos, entre ellos, el exdirigente de la Onappafa, Francisco Javier Reyes Ortiz.
Además, decomisaron dos camiones de carga, propiedad de los transportistas, que habían usado para bloquear la planta.
Después del operativo, el servicio de pipas se restableció en gasolinerías de la zona.
Vecinos Ponen Barricadas Por Temor A Ser Saqueados
La sicosis se apoderó de los pobladores de la zona norte de la ciudad de Veracruz, quienes colocaron barricadas y velaron por horas ante la presencia de personas extrañas y la advertencia de que habría vandalismo en fraccionamientos residenciales.
Fue tanta la presión y la vigilancia, que los pobladores lograron atrapar al menos a tres personas que, aprovechando la confusión, trataron de atracar tiendas de la zona. Las amarraron a postes y las entregaron a la policía.
Los vecinos de fraccionamientos como El Campanario, Oasis, Geo y Colinas de Santa Fe vivieron horas de zozobra, ante una serie de hechos que indicaban que serían asaltados, por lo que buscaron armarse con palos y tubos. Se organizaron y lograron incluso amedrentar a quienes intentaron ingresar a la zona.
Los testimonios señalan que los intrusos eran personas de otra región del país, “con acento chilango o poblano”, describió Ely Valle, una de las afectadas. Las familias se turnaron así toda la noche, porque temían por la vida propia y de sus hijos.
Por la tarde, en conferencia de prensa, el gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares, refirió que van 532 personas detenidas, involucradas en los actos de vandalismo y saqueo, que afectaron a 15 municipios veracruzanos.
Los hechos más graves, dijo, fueron en Veracruz, Boca del Río, Medellín, Tierra Blanca, Tres Valles, Isla, Minatitlán, Agua Dulce, Nanchital, Misantla y Paso del Macho. En menor medida en Acayucan, Coatzacoalcos, Las Choapas y Gutiérrez Zamora.
El gobernador también se comprometió a reforzar la seguridad y las tareas de inteligencia e investigación para conocer el origen de la convocatoria de estos actos delictivos.
Yunes Linares aseveró que las redes sociales fueron determinantes para identificar a un buen número de personas que incluso presumieron lo que saquearon en tiendas departamentales y de autoservicio saqueadas.
Fuente: Staff