A esta altura, la lista de intérpretes que declinaron presentarse en la ceremonia inaugural del presidente electo Donald Trump es un compendio de lo más diverso de la escena musical mundial. Desde Elton John y Jennifer Holliday hasta Moby, Garth Brooks, Céline Dion y Andre Bocelli, los responsables de organizar el evento tuvieron que correr hasta el último momento para conformar una grilla que contara con algún otro nombre más que las bandas militares, que responden a Trump de todos modos.
Una de las cantantes que sí se presentará es Jackie Evancho, una joven de 16 años que se hizo conocida gracias a su participación en el reality «America’s Got Talent». Pero Evancho, que interpretará el himno nacional de Estados Unidos, conocido como «The Star Spangled Banner (La bandera tachonada de estrellas), se ha visto en el centro de una fuerte polémica en las redes sociales con sus fans, quienes la califican de «vendida», «chupamedias» y «traidora» en Facebook y Twitter.
«Pienso que esto es por mi país, y si la gente quiere odiarme por eso, me parece que lo hace por las razones equivocadas», declaró Evancho en una entrevista con The New York Times. Más allá de la controversia pública, el cisma que provoca la llegada de Trump a la Casa Blanca le pega directamente a la familia de la cantante, ya que la hermana mayor de Evancho, Juliet, de 18 años, es transgénero. Junto a las mujeres, los homosexuales, mexicanos y musulmanes, los transgénero son una minoría que también ha visto de cerca la ira de los seguidores de Trump.
Más allá de las notorias ausencias y polémicas, la ceremonia inaugural del presidente electo se llevará a cabo el viernes 20, y algunos detalles ya se conocen. Un elemento fundamental del evento es la plataforma inaugural, una tarima que se construye especialmente para la ocasión y que se empieza un año antes del evento. Una ceremonia conocida como la del «clavo inaugural» marca el arranque de la obra: allí se juntan el arquitecto a cargo del proyecto (en este caso, Stephen T. Ayers) junto con funcionarios del Comité Bicameral del Congreso para Ceremonias Inaugurales (JCCIC, por sus siglas en inglés) y, martillo en mano frente a una tabla de madera, señalan el punto de partida.
La del 2017 tendrá cerca de 1000 metros cuadrados, la más grande jamás hecha junto con la de 2005. Allí se ubicarán alrededor de 1600 personas, entre ellas el presidente y vicepresidente electo, sus familias, miembros del gabinete, miembros del congreso, ex presidente (estarán Clinton, Carter y Bush (h), el único ausente será el primer Bush, quien no irá por razones de salud), jueces de la Corte Suprema y gobernadores.
La plataforma se piensa y se diseña de manera tal que no desentone con el entorno del Capitolio, y luego de la ceremonia inaugural, se la desarma y las piezas se reciclan.
El evento que marca el comienzo de las festividades por la asunción de un nuevo presidente se llama Make America Great Again! Welcome Celebration (¡Hagamos América grande nuevamente! Celebración de bienvenida) y arranca mañana, jueves 19, a las 16 de Washington DC (18 horas de Argentina). Allí es donde se darán cita el grueso de los números musicales y se requiere entrada para pasar a los lugares que tiene mejores vistas del Lincoln Memorial, que es donde se desarrollarán los distintos shows.
Allí estarán presentándose, entre otros, el conocido grupo de baile Las Rockettes, una compañía fundada en 1925 y que se presenta regularmente en el Radio City Musical Hall de Nueva York. Según diversas fuentes, la decisión de presentarse fue motivo de fuertes controversias dentro del grupo, y sus representantes tuvieron que salir a aclarar que las bailarinas no estaban contractualmente obligadas a presentarse, y que las que no quisieran podían desistir de participar.
El show central del jueves estará a cargo del cantante de country Toby Keith. Oriundo del Estado de Oklahoma y fuertemente identificado con el «patriotismo» estadounidense, ha tocado numerosas veces para los soldados ubicados en Afganistán e Irak. Fue un visible impulsor de la reelección de George W. Bush y expresó su admiración para Sarah Paulin, aunque en un momento dado también calificó a Barack Obama como el «mejor candidato Demócrata desde Bill Clinton».
Sobre las escalinatas del Lincoln Memorial también tocará la banda 3 Doors Down, una agrupación fundada en 1996 y que tuvo su mayor éxito alrededor del año 2005, con el lanzamiento de su tercer álbum de estudio, Seventeen Days.
El Coro Tabernáculo Mormón, por su parte, estará presente durante la ceremonia de jura de Trump, al igual que Jackie Evancho. El grupo que se encontró con fuertes críticas debido a su decisión de estar presente para la ceremonia inaugural, y Jan Chamberlain, una de sus miembros, inclusive renunció a su lugar, afirmando que actuar para Trump sería «apoyar la tiranía y el fascismo». Es un coro voluntario, formado por 360 miembros, que es parte oficial de la Iglesia Mormona, y se presenta regularmente en el Tabernáculo de Salt Lake City, Utah, acompañado por un órgano de 11.623 tubos.
Fuente: Clarín
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