El comercio total bilateral entre México y Estados Unidos podrá crecer “siempre y cuando la renegociación del acuerdo comercial entre los dos países resulte beneficiosa para ambas partes”, dijo Anthony Scaramucci, Asistente y Director de Vinculación Pública de la Oficina del Presidente Electo de los Estados Unidos.
Afirmó que, de acuerdo con las reglas de negociación que típicamente utiliza el Presidente Electo, “ambos países podrán resultar ganadores tras una negociación comercial” donde se busque el beneficio común.
Scaramucci afirmó que el Presidente Electo Trump sostiene una “comunicación estrecha” con el Presidente Enrique Peña Nieto.
Aseguró también que la relación con el gobierno mexicano puede permitir una buena negociación comercial.
México comercia con Estados Unidos —en el marco del Tratado de Libre Comercio de América del Norte— anualmente más de 580 mil millones de dólares, constituyendo una de las zonas de libre comercio más vigorosas del planeta y posicionando a México desde hace varios años como el segundo socio comercial más relevante para la Unión Americana.
En una reunión a puerta cerrada con un pequeño grupo de periodistas seleccionados por el Foro Económico Mundial, Scaramucci afirmó que la personalidad de Donald Trump es destacada porque no se comporta como el 99 por ciento de los políticos tradicionales.
Dijo que Trump tiene un extraordinario instinto político, así como una fenomenal capacidad para establecer relaciones humanas.
Ante la pregunta de si solo era un “dealmaker”; es decir, un negociador que busca ganancias de corto alcance, respondió que el Presidente Electo merecía más crédito que únicamente ser etiquetado así, y que tiene una gran la capacidad de sorprender, como lo hizo cuando visitó al Presidente Peña en México.
“Nadie lo esperaba”, pero lo hizo, afirmó. También dijo, plenamente convencido, que Trump es un estratega de alto calibre.
Scaramucci habló del Brexit, y refirió que bajo la óptica de Trump el resultado del referéndum en el Reino Unido se debió a que el sistema actual ha generado a un gran número de personas “con ansiedad e insatisfacción económica”.
Asimismo, refirió que éste no es un buen momento para apostar financieramente contra los Estados Unidos (ni contra el Reino Unido).
También aseguró que el uso intensivo de redes sociales por parte del Presidente Electo Trump debe ser visto como una forma de comunicarse de manera directa con la gente ante la incapacidad de muchos actores de la vida pública de mirarle con una óptica más cercana, tal como lo hacen los miembros de su familia y su círculo cercano de colaboradores.
Los políticos tradicionales no habían utilizado estos medios porque “tuvieron miedo”, aseguró.
Fuente: El Financiero