El equipo de transición presidencial de Donald Trump rechazó este sábado las versiones de que Rusia realizó una campaña de ciberataques para inclinar la balanza electoral a favor del republicano y puso en duda la veracidad de las agencias de inteligencia estadounidenses que investigan los ataques en internet de la pasada campaña.
Los asesores del magnate difundieron un comunicado referente a los agentes de inteligencia, quienes, señalaron, son «la misma gente que dijo que Saddam Hussein tenía armas de destrucción masiva».
El viernes, la Casa Blanca informó que el Presidente Barack Obama ordenó a las autoridades de inteligencia hacer una revisión extensa de los ciberataques realizados durante la temporada electoral, entre ellos la filtración de correos que sacudió la campaña presidencial y generó nuevas preocupaciones sobre la intromisión de Rusia en las elecciones estadounidenses.
La orden de Obama para que la revisión a gran escala se complete antes de que deje el cargo el mes próximo no fue bien recibida en las oficinas centrales del Presidente electo en el rascacielos Trump Tower. Según los informes publicados, la CIA cree que Rusia actuó específicamente para dañar la imagen de Hillary Clinton durante las elecciones.
«Creo que hay personas dentro de estas agencias que están disgustadas con el resultado de las elecciones», expresó el portavoz del equipo de transición de Trump, Sean Spicer, en declaraciones a CNN.
Spicer también negó un informe en el diario The New York Times de que los hackers se infiltraron en los sistemas del Comité Nacional Republicano durante las elecciones.
Dijo que el CNR ha trabajado con agencias de inteligencia, las cuales le aseguraron «con certeza» que sus sistemas nunca fueron hackeados.
Tanto el Times como The Washington Post informaron sobre una evaluación secreta de la CIA, la cual concluyó que Rusia intervino para ayudar a que Trump ganara, y no solo para desprestigiar al sistema electoral estadounidense, como hasta ahora había señalado la inteligencia del país.
Spicer cuestionó por qué la CIA no estaba haciendo pública su evaluación, como en cambio las agencias de inteligencia sí lo hicieron después de que se supo de la infiltración de hackers al Comité Nacional Demócrata.
No hubo una respuesta oficial inmediata de parte de Moscú, pero Oleg Morozov, miembro del comité de relaciones exteriores de la Cámara alta del Parlamento ruso, rechazó las sospechas de una interferencia rusa diciendo que eran «tonterías y paranoia», según la agencia de noticias RIA Novosti.
Morozov describió las acusaciones como un intento de obligar al próximo Gobierno estadounidense a seguir el curso de Obama en contra de Rusia.
La revisión, encabezada por agencias de inteligencia, será una «inmersión profunda» en un posible aumento de «ciberactividad maliciosa» durante la campaña electoral, dijo el viernes el portavoz de la Casa Blanca, Eric Schultz.
En la revisión se examinarán las estrategias, los blancos, los actores principales y la respuesta del Gobierno federal a los recientes hackeos de correos electrónicos, así como incidentes reportados en elecciones pasadas, dijo.
En los meses previos a las elecciones presidenciales, las cuentas de correo electrónico de funcionarios del Partido Demócrata y de un alto asesor de la campaña de Hillary Clinton fueron hackeadas, algunos emails fueron filtrados y varios de ellos, de contenido privado y embarazoso, fueron difundidos en línea. Muchos demócratas creen que la intrusión cibernética benefició a la candidatura de Trump.
El portavoz de la Casa Blanca dijo que Obama lanzó la investigación como una forma de mejorar la defensa estadounidense contra los ciberataques y no pretende poner en tela de juicio la legitimidad de la victoria de Trump.
«Este no es un esfuerzo por impugnar el desenlace de las elecciones», afirmó Schultz.
Los legisladores demócratas han estado presionando al Mandatario para que dé a conocer más información secreta sobre el papel que desempeñó Rusia, ante el temor de que Trump, que ha prometido tener una relación más amistosa con Moscú, pudiera no darle prioridad al asunto.
Dadas las declaraciones de Trump, «hay mayor urgencia a la necesidad de que se efectúe una revisión exhaustiva antes de que el Presidente Obama deje el puesto el mes próximo», dijo el representante Adam Schiff de California, el demócrata de mayor rango en la comisión de inteligencia de la Cámara de Representantes.
Si el Gobierno no responde «con firmeza» ante ese tipo de acciones, «podemos esperar ver mucho más de esto en un futuro cercano», agregó.
La Casa Blanca dijo que difundiría partes del reporte y le informaría a los legisladores y a funcionarios estatales pertinentes sobre los hallazgos.
Hizo énfasis en que el informe no se enfocará solamente en las operaciones rusas o en los hackeos de las cuentas de John Podesta, presidente de la campaña de Clinton y del Comité Nacional Demócrata. Schultz dijo que las autoridades revisarán incidentes que se remontan a la temporada electoral de 2008, cuando las campañas del senador John McCain y la de Obama fueron víctimas de los piratas cibernéticos.
Funcionarios de inteligencia han dicho que Obama y el candidato presidencial republicano Mitt Romney fueron blanco de ciberataques chinos en la campaña de 2012.