Las seis refinerías del país —Cadereyta, Madero, Tula, Salamanca, Minatitlán y Salina Cruz— dejaron de producir en promedio 121 mil 601 barriles diarios de gasolinas en noviembre, cantidad comparada con la producción registrada por Pemex al inicio de año.
El problema se concentra en tres refinerías, pues de los 121 mil 601 barriles diarios, 90 por ciento (109 mil 324 bidones) corresponden a Cadereyta, Madero y Tula, de acuerdo con las últimas cifras de la base de datos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Lo que se ha dejado de producir equivale a casi la demanda de las entidades que reportaron un serio problema de desabasto, como Aguascalientes, Durango, Guanajuato, Michoacán, San Luis Potosí y Zacatecas, las cuales suman un consumo promedio anual de más de 115 mil barriles diarios de gasolinas.
La refinería de Cadereyta abastece a Nuevo León, Coahuila, Chihuahua y en forma parcial a Durango, San Luis Potosí y Tamaulipas.
La de Tula distribuye a la zona metropolitana del Valle de México, mientras que la de Madero a Tamaulipas y a la zona del Golfo.
De los 68 mil 69 barriles diarios de gasolinas que producía Cadereyta en enero de este año, en noviembre solo reportó 18 mil 770 barriles diarios, es decir, en 10 meses dejó de producir 49 mil 299 barriles diarios en promedio.
La elaboración de diésel pasó de 63 mil 665 barriles diarios a 31 mil 620, 32 mil 45 barriles menos.
En Madero, al comenzar 2016 la producción de gasolinas se ubicaba en 51 mil 560 barriles diarios; para el mes pasado estaba en 20 mil 344 barriles, una disminución de 31 mil 216 barriles diarios. La elaboración de diésel ha bajado 11 mil 362 barriles.
En tanto, la refinería de Tula ha dejado de producir 28 mil 809 barriles diarios de gasolinas, pues en enero reportó 74 mil 505 barriles y para noviembre solo 45 mil 696 barriles al día. La producción de diésel también cayó en 27 mil 701 barriles diarios en el periodo que se menciona.
El procesamiento de crudo para la elaboración de petrolíferos en estas tres refinerías ha caído 47.3 por ciento, pues en enero se procesaron 540 mil 864 barriles y para noviembre 284 mil 968 barriles diarios de crudo.
“NO HABRÁ ESCASEZ”
A pesar de que los números muestran una menor producción de combustibles, Pemex asegura que la falta de gasolinas y diésel no tiene que ver con la falta de disponibilidad del producto.
En entrevista con Radio Fórmula, el subsecretario de Hidrocarburos de la Secretaría de Energía, Aldo Flores, aseguró que en 2017 no habrá escasez de combustibles, pero sí reflejarán su costo real.
“El producto siempre ha estado disponible, ha estado en los inventarios de Pemex y se ha ido regularizando el servicio poco a poco; las gasolinas en el país van a reflejar su verdadero costo de adquisición, procesamiento, transporte, almacenamiento y distribución en las estaciones de servicio”, expresó.
Dijo que México está transitando de un modelo monopólico a uno de competencia, pues el país ha cargado por muchos años con un rezago en inversiones por el mecanismo de ajuste que se aplicaba a los precios de las gasolinas.
Sin embargo, el funcionario aclaró que los precios de las gasolinas no van a aumentar permanentemente, sino que se verán fluctuaciones conforme al comportamiento del mercado.
Por ejemplo, en el caso de Estados Unidos, en los últimos dos años las gasolinas han bajado de precio entre 30 y 40 por ciento, derivado de la caída en los precios del crudo. Pero ahora los precios del petróleo se han ido recuperando y eso se tiene que reflejar en los costos.
Según el cronograma de la Comisión Reguladora de Energía, en marzo de 2017 va a comenzar la liberalización gradual de los precios, el cual debe culminar en todo el país en diciembre de ese mismo año.
Fuente: Milenio