El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, revirtió la medida que sacó de circulación al billete de 100 bolívares, el más utilizado en el país sudamericano, tras dos días de protestas y saqueos en varias ciudades por la falta de efectivo.
El mandatario socialista dijo que mantendrá la vigencia del billete de mayor denominación hasta el 2 de enero de 2017, tras denunciar un «sabotaje internacional» que impidió a tres aviones de carga trasladar a Venezuela nuevos billetes para suplir al que fue eliminado el jueves.
En las últimas 48 horas, en zonas de frontera y varias ciudades de Venezuela la población salió a las calles a reclamar que no podía usar ni canjear sus billetes de 100 bolívares porque buena parte de las agencias bancarias y cajeros automáticos ya no dispensaban billetes de menor denominación.
La situación, que se tornó violenta por saqueos a comercios y camiones, dejó heridos y un fallecido, informó el sábado el Ministerio Público.
«Venezuela ha sido víctima de un sabotaje, una persecución, para que el nuevo cono monetario, los nuevos billetes no lleguen», dijo Maduro para justificar la nueva orden.
«Un avión de carga contratado y pagado por Venezuela, cuando iba volando le dieron la orden: ‘desvíese y váyase a otro país'», explicó en sus declaraciones transmitidas por la televisora estatal. Horas antes, Maduro acusó del sabotaje al Gobierno de Estados Unidos.
El Gobierno de Maduro mantendrá hasta enero el cierre de los pasos fronterizos con Brasil y Colombia, incluso después de que cientos de venezolanos cruzaron el sábado uno de los límites hacia el lado colombiano, desafiando la medida vigente desde el martes.
«Estamos protestando por tantos atropellos. Los bancos colapsaron, no dan más de 3.000 bolívares y con esa cantidad no alcanza para comer», contó una señora que pidió mantener su nombre en reserva, tras atravesar el puente fronterizo pese a la presencia de fuerzas militares venezolanas.
La sorpresiva medida de eliminar el billete de 100 bolívares se hizo para detener a mafias en Colombia a las que Maduro acusa de usar moneda venezolana para operaciones cambiarias que habrían disparado el precio del dólar paralelo y ejercido mayor presión sobre una inflación de tres dígitos.
Pero al quedar fuera de circulación en apenas tres días la mitad de los billetes del sistema, muchos venezolanos no lograron canjear el efectivo disponible y surgieron protestas, en una nación donde el 40 por ciento de la población no tiene cuenta bancaria y paga en efectivo gastos como la gasolina y el transporte.
Maduro había prometido la llegada de los nuevos billetes para el domingo, pero la falta de efectivo en localidades como Ciudad Bolívar, en el sur del país, provocó que la población irrumpiera el sábado en al menos la mitad de los comercios y almacenes de comida, informó el gremio de comerciantes de la ciudad.
La situación llevó al Concejo Municipal de Ciudad Bolívar a prohibir la circulación de personas la noche del sábado, en medidas que calificó de «especiales» y que requieren del apoyo de las fuerzas armadas para ser aplicadas.
Más hechos violentos se produjeron en supermercados y comercios cerca de la frontera y en Maracaibo, la segunda ciudad más poblada del país, 15 negocios fueron saqueados pese a la actuación de fuerzas policiales y militares, dijeron testigos a Reuters.
Fuente: AméricaEconomía