Rusia intervino en las elecciones de Estados Unidos de 2016… Y lo hizo para ayudar a Donald Trump, no solo para minar la confianza en el sistema electoral del país, como se había señalado hasta ahora.
A esta conclusión llegó la Agencia Central de Inteligencia (CIA, por sus siglas en inglés), tras realizar una evaluación secreta, según reveló The Washington Post.
Agentes de inteligencia han identificado a individuos que tienen conexiones con el Gobierno ruso, quienes entregaron miles de emails hackeados a WikiLeaks. Los correos provenían de las cuentas del Comité Nacional Demócrata y otros, incluyendo al director de campaña de Hillary Clinton, John Podesta.
Según la agencia, estos individuos son conocidos por la comunidad de inteligencia y sus acciones forman parte de una operación más amplia para impulsar a Trump y minar las oportunidades de Clinton.
«La comunidad de inteligencia considera que la meta de Rusia era favorecer a un candidato sobre el otro, ayudar a Trump a ser elegido», dijo un funcionario sénior de la agencia de inteligencia en una presentación a senadores estadounidenses.
La CIA compartió su investigación con algunos senadores clave en una presentación a puerta cerrada en el Capitolio la semana pasada, según informó el rotativo estadounidense.
Los agentes que hicieron la presentación ante algunos senadores explicaron que ahora estaba «muy claro» que la meta de Rusia fuera que eligieran a Trump.
Pero entre los empleados de inteligencia que participaron en la investigación hay algunas discrepancias, principalmente porque hay algunas preguntas sin respuestas.
Por ejemplo, no se ubicó a funcionarios del Kremlin «dirigiendo» las operaciones, sino que identificaron a personas muy cercanas a la administración rusa participando. En el pasado, Rusia ha utilizado a intermediarios para llevar a cabo operaciones sensibles de inteligencia.
Julian Assange, el fundador de WikiLeaks, dijo en entrevista en la televisión rusa que «el Gobierno ruso no fue la fuente» de la filtración de correos de los demócratas.
La revelación se produjo después de que, esta mañana, la Casa Blanca informara de la intención de la Administración Obama de profundizar en la investigación sobre la intrusión de Rusia en los comicios estadounidenses.
Hasta ahora, la CIA ya había realizado investigaciones relacionadas con la injerencia del país europeo en el proceso electoral de EU, pero las conclusiones a las que habían llegado señalaban la intención de esta nación de minar la credibilidad en el proceso electoral estadounidense, pero no de buscar el triunfo de uno de los candidatos.