“No sabemos si vamos a llegar a diciembre… Ya no sabemos qué hacer, hemos protestado y tocado puertas, pero nada. Es un hecho que la deuda se va a quedar para el próximo gobierno, pero nosotros no sabemos si nos vayan a cumplir”, dice Don Homero Salgero, quien proveyó de uniformes al gobierno estatal en esta administración.
El empresario tiene un pequeño taller de costura en Ocotlán de Morelos que le costó años poder levantarlo para poder fabricar cantidades industriales y ser así proveedor. Ahora de los cinco empleados que tenía sólo tiene tres; cerrar el negocio es ya una posibilidad.
«Para poder cumplir con un compromiso hecho en un programa que creímos era noble me endeude y ahí los resultados: un gobierno omiso, indolente ante las necesidades, a las carencias y sufrimientos de la gente; ¿cuál cambio?, ¡en Oaxaca nada cambio!”, recrimina con voz entrecortada.
A seis días de que concluya el periodo de Gabino Cué y entre Alejandro Murat, la exigencia de cubrir deudas por servicios adquiridos a particulares va creciendo.
Especialmente los empresarios que participan en el programa Uniformes Escolares han hecho públicas sus demandas desde hace tres meses; la deuda es de 300 millones de pesos a 150 empresas que aceptaron un convenio con vales para entregar los productos.
El lunes pasado, durante la comparecencia del secretario de Finanzas Enrique Arnaud Viñas, Homero Salgero acudió a protestar al Congreso y ver si los diputados podrían apoyarlos. El hombre palideció lejos escuchó al secretario de Finanzas informar a los legisladores que la deuda a proveedores se quedaría en 2 mil 200 millones de pesos.
Como Homero, cientos de empresarios oaxaqueños atraviesan la misma situación. Desde hace tres meses, y todos los días se ha registrado protestas y bloqueos, la mayoría en demanda de pagos atrasados cumplimiento de demandas y liberación de recursos.
Para Gabino Cué, quien el próximo jueves deja el cargo, la problemática que se vive no es grave y pidió «entender» a los que protestan que esta administración ya no puede hacer nada, pues la deuda esta, ahora, en manos del próximo gobierno.
El gobernador ha señalado que la deuda es manejable y que Alejando Murat “tiene todo para pagar, luego del presupuesto de 90 mil millones aprobado para Oaxaca”.
Fuente: LSR