José Antonio Meade, secretario de Hacienda y Crédito Público, aseguró que no habrá cambios en el Paquete Económico 2016 por el triunfo en las elecciones presidenciales de Estados Unidos de Donald Trump.
«No habría cambios en el paquete y no habría cambios porque el paquete tiene fortaleza para irse ajustando conforme se vayan ajustando las variables ya el año que entra. Lo que pensamos es que hoy lo que tenemos es volatilidad y tenemos incertidumbre».
En entrevista con José Cárdenas, el secretario de Hacienda dijo que desde el gobierno de México se mandan señales de certeza, pero también se irán encontrando otras cuando se tenga mayor información conforme avance en la transición y asuma el mandato el nuevo gobierno.
Ante la posibilidad de que el tipo de cambio del peso frente al dólar, en donde se prevé que la moneda de la Unión Americana llegue a niveles de 23 o 24 pesos ante el nerviosismo, José Antonio Meade dijo que el momento de mayor incertidumbre fue el día de las elecciones, el 8 de noviembre.
«Porque era incertidumbre combinado con la sorpresa de un resultado que no era el que se esperaba».
El dólar pasó en algún momento de la madrugada incluso los 21 pesos, pero posteriormente fue disminuyendo el tipo de cambio este miércoles.
«Hoy se ubica en el interbancario por debajo de 20, por lo que pareciera que la parte más difícil de la incertidumbre es la que ya sufrimos y lo que habremos de seguir viendo, seguramente, seguirán siendo episodios de volatilidad, episodios complicados de los que habremos de estar atentos en un contexto en donde poco a poco iremos teniendo más elementos que vayan generando certidumbre».
Asimismo, desde la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) se sostiene que el escenario central para 2017 en cuanto al crecimiento de México se ubica entre 2 y 3 por ciento. «Eso ubicará a México como un país al que le vaya bien, comparado con Latinoamérica que sigue sumido en una recesión profunda, comparado con la OCDE que está creciendo poco».
Por último, el secretario de Hacienda dijo que las calificadoras están atentas a la situación por la que atravesará México, y en el caso de Fitch, no está preocupado por la calificación no por la deuda.