Primero y diez
Colaboración de Bolivar Roblero
En los lejanos años sesenta la Televisión Mexicana dependía únicamente de dos proveedores: las producciones locales conformada por telenovelas programas infantiles (ahí empezó Chabelo su largo peregrinar por la TV) y de noticias. La mayoría de la oferta para público adulto estaba conformada por series importadas de Estados Unidos, muchas de las cuales habían sido dobladas en Miami (era curioso escuchar al Marshal Dillon, el rudo Sheriff Texano, protagonista de la celebérrima “Ley del Revólver”, hablar con un dejo costeño).
Yo siendo niño (¡uppsss… calcule mi edad!) me sentaba horas y horas frente al televisor para contemplar “Bonanza”, “La ley del Revólver” (Gunsmoke, en realidad), “La Familia Monster” y dos programas policiacos que me gustaban mucho “Los Vengadores” y “Audacia es el Juego”, esta última emisión (que duró un suspiro de 3 años: de 1968 a 1971 – nada, comparada con los 14 años de “Bonanza” o los 20 de “Gunsmoke”) era totalmente diferente a todas las demás, en vez de que la trama girara en torno a un protagonista, esta contaba con tres distintos estelares, Glenn Howard un empresario astuto y sagaz; Jeff Dillon un reportero muy perspicaz y Dan Farell, un policía retirado que dedicaba sus esfuerzos a desenmascarar al crimen organizado, cada capítulo tenía un protagonista diferente a veces el empresario, otras el reportero y en ocasiones el policía, la trama estaba llena de enredos y era sumamente interesante.
“Audacia es el Juego” se mantuvo al aire en la TV mexicana todavía hasta mediados de la década de los 70 con un éxito bastante aceptable.
El nombre original de la serie era “El nombre del juego” pero el nombre que se escogió para el mercado hispano resultaba mucho más atractivo, hoy aún la recuerdo y de vez en vez utilizo como grito de batalla: “¡Vamos: Audacia es el Juego!”.
La noche del lunes pasado, así gritaba en los últimos minutos del interesantísimo partido entre los HALCONES MARINOS de Seattle y los BILLS de Búfalo, un poco de arrojo pedía yo a Rex Ryan, que se mostró en todo momento demasiado calculador, medroso en exceso, incapaz de arriesgar un poco más, para ganar un juego que tenían al alcance de la mano: en los últimos 5 minutos del partido con la pizarra 25-31 en favor de Seattle, los Bills fueron capaces de llegar hasta la zona roja de los Halcones Marinos, pero un miedoso Ryan mandó una previsible serie de corridas, que fueron rápidamente detectadas por la defensa de los anfitriones y como resultado se fueron con las manos vacías, no obstante, en su siguiente ofensiva, Bills logró de nueva cuenta llegar hasta la yarda 12 de Seattle y una vez más vimos la actitud medrosa del Staff de Coacheo de Búfalo que en lugar de “ir por todas las canicas” jugándosela en pases, intentó previsiblemente volver a correr el balón y por supuesto Seattle se dio cuenta de ello y ajustó su defensiva para no permitirle hacerlo; así en 4 oportunidades vimos a Lesean Mc.Coy estrellarse contra la muralla de Seattle y únicamente cuando ya casi no había opción (en cuarta y gol y el reloj a punto de expirar) se arriesgaron a lanzar un pase que resultó incompleto.
Para los seguidores de los Bills, entre ellos mi amigo el “Duende Preguntón”, yo creo que fue muy triste ver como se perdía un partido que pudo haberse ganado, si el coach Rex Ryan hubiera sido un poco más arrojado e inteligente y en cambio tuvo que conformarse con una derrota que a estas alturas complica las aspiraciones de Bills de regresar a la postemporada; la verdad es que los fans de los Bills que no son pocos, no se merecen esa actitud cobarde y medrosa. Tal vez esa factura le sea pasada en Diciembre a Ryan y compañía, espero que no pero…
Y hablando de “Audacia es el juego” creo que es el momento que Jason Garrett coach de los Vaqueros, ponga una gota más de audacia y se la juegue con su joven QB Dak Prescott, ahora que parece que Tony Romo estaría listo para volver.
Muchos podrían pensar que es una locura dejar en la banca a un Mariscal de élite que cuesta millones al equipo y que ha demostrado cierto nivel de excelencia; pero un viejo Coach, astuto audaz y zorrero (Bill Belichick) tomó una decisión similar hace ya 15 años sentando al QB estrella (Drew Bledsoe) para dar paso al novato (Tom Brady) que no lo ha defraudado desde entonces, llevando al equipo (Los Patriotas) a 6 Superbowls, ganando 4 de ellos e imponiendo una serie de marcas difíciles de igualar. ¿Que opina Señor Garrett… no cree que valdría la pena arriesgarse?… Recuerde: “Audacia es el juego”