En el Santiago Bernabéu, Real Madrid recibió un mazazo en el inicio. Fue a los seis minutos, cuando Rico ganó en lo alto y, de cabeza, enmudeció a los hinchas locales, que habían llegado al estadio para ver una goleada.
El fervor y las ganas del Real Madrid tuvieron su premio a los 18 minutos, cuando tras una jugada de Cristiano Ronaldo, estampó el empate. pero ese gol, en lugar de envalentonar al Real Madrid, lo aplacó.
La segunda parte fue previsible. Con Real Madrid como protagonista, pero sin ese asedio habitual. tuvo sus ocasiones, claro. Como ese cabezazo de Bale que devolvió el palo. O aquel remate de Cristiano que exigió una buena respuesta del arquero Riesgo.
Mientras, el Eibar apostó a una contra Y casi festeja en el final, cuando Pedro León se escapó pero chocó con a firmeza de Pepe en el momento exacto que estaba por crucificar a Keylor Navas.
Llegó el final, el descontento de los hinchas del Real y una conclusión: el equipo no está bien. Cuatro empates en línea lo confirman.
Fuente: Clarín