En mayo de 1991 El Capitán Cousteau lanza una campaña para conseguir millones de firmas para que la gente apoye su Carta de los Derechos para las Generaciones Futuras, escrita en 1979. Un poco antes había logrado que el gobierno francés de François Mitterrand la presentara ante la ONU.
“La petición popular un arma muy poderosa, tiene un poder extraordinario y sin embargo está infrautilizada”, declaró ante los medios al presentar su campaña que lo llevaría a ser en los últimos años de su vida embajador de la ONU para los océanos.
“Nos toca demostrar que nuestro cerebro guía nuestro corazón”, dijo ante el pleno de la ONU en septiembre de 1994 cuando planteó por vez primera el problema de la sobre explotación y contaminación de los mares.
A pesar del éxito de su anterior campaña que recolectó 1.5 millones de firmas para convertir a la Antártida en un santuario de conservación ecológica, nunca en vida vio logrado ese objetivo. Después se lanzó a conseguir millones de firmas para la Carta. Finalmente 25 años después el sueño de Cousteau se ha vuelto realidad.
La Unión Europea y otros 24 países firmaron la creación por 35 años de la mayor reserva marina del mundo en la Antártida con 1.55 millones de Km2 (la extensión de España y Francia) es un acuerdo histórico, que gracias China y Rusia fue acotada a tan solo 35 años.
En aquella época Cousteau y la ONU convergieron en que la contaminación del aire y el océano, así como la sobre población del planeta ponía en riesgo nuestra sobrevivencia. Proponía educar a las mujeres y darles oportunidades para controlar las poblaciones. También controlar el despilfarro de energía, el control de uso de combustibles fósiles y la promoción de energías alternativas.
Un año después se llevó a cabo la Reunión de Río de Janeiro donde se comenzó con las acciones para combatir la pobreza y la sobrepoblación, el Cambio Climático y la pérdida de la biodiversidad. Ahí Cousteau se consolidó como el embajador de la ONU para el medio ambiente.
Desde entonces para llegar al gran público el organismo utiliza a figuras públicas importantes para que lleven su mensaje. Desde 2014 Leonado Dicaprio es embajador, ahora se le llama de la Paz de la ONU. Antes que él Michael Douglas, Charlize Theron y George Clooney lo fueron.
Ayer Di Caprio lanzó en todo el mundo doblado en 45 idiomas y lanzado en 171 países, el documental Before the flood que da título a este artículo, aunque es español fue lanzado como “Antes de que sea tarde” para restarle sensacionalismo y darle más acción. Fue dirigido por Fisher Stevens (Director de la popular Cortocircuito, 1988), director del laureado documental Mission Blue de nuestra querida Sylvia Earle, y fue producido por Martin Scorsese. Fue lanzado simultáneamente en FOX y NatGeo a la hora del juego en que Chicago vencía a Cleveland en el 5 partido de la serie mundial.
DiCaprio es el rostro frente a las cámaras. Desde que es embajador de la ONU e incluso unos años antes ha hablado del Cambio Climático, CC: “Es el problema más grande que enfrenta la humanidad”. Ha dedicado parte de su fortuna a construir casas 100% sustentables que no son nada baratas. Recientemente en el festival de Saint Tropez subastó una en 45 mdd. Es un activista medio ambiental muy intenso. Adquirió recientemente los derechos del escándalo de la VW para llevarlo a la pantalla.
En este documental que tomo 6 años producirlo, presenta el problema del CC viajando por todo el mundo, por tierra aire y mar: Ártico, Groenlandia (deshielo), Indonesia en Borneo y Sumatra en dos de las tres selvas, junto al Amazonas, más importantes del mundo (deforestación y muerte de rinocerontes y elefantes por incendios debido a la siembre aceite de Palma para consumo principalmente en EU), China e India (sobre población, crecimiento industrial y contaminación), la sequía en el oeste de
EU, las inundaciones en Miami, y la contaminación y tala del bosque boreal en Canadá por explotaciones petroleras.
En el océano la desaparición del 50% de los arrecifes de coral, la sobrepesca. El aumento del nivel del mar en las islas en Indonesia. Incluso hay una escena de una trifulca por la privatización del agua en nuestro país y el subtítulo debido a que así lo llama su entrevistado John Kerry, Secretario de Estado de EU: La guerra en México por el Agua. Y dice esta ya comenzó. La imagen es muy sugerente. En nuestro traspatio hay una guerra por el agua, muy cercana a nosotros. Las entrevistas son una parte muy importante en la estructura del documental que no presenta nada nuevo más que el dar voz a los científicos y actores del clima. Entre ellos el presidente Obama, el Papa Francisco y Piers Seller de la NASA.
El problema del CC es el que menos importa a los votantes en EU. Solo el 2% piensa que es una prioridad. Cuando cambia impresiones con el presidente Obama le dice “si no crees en al CC no te deberían de permitir acceder a un cargo público”, en referencia indirecta a Trump. Obama no le entró al asunto pero dijo, “El cambio climático parece perversamente diseñado para ser muy difícil de resolver políticamente. Para resolver este problema, vamos a necesitar una innovación extraordinaria, en cosas como el almacenamiento de la energía eólica y solar. Eso va a requerir la movilización de la gente y, en último término, que se exprese en las urnas”.
No quiero mirar atrás dentro de 30 años y saber que no hice nada, declaró el actor al diario el País en la presentación ayer del documental al mundo.
Me llamaron la atención dos asuntos. Cuando entrevista al ex astronauta Piers Seller, en estado terminal por un cáncer en el páncreas, especialista de la NASA en CC. “esto me motivo a pensar cómo puedo contribuir para ayudar con el poco tiempo que me queda”.
“En la comunidad científica no hacemos el mejor trabajo para comunicar esta amenaza al público”. “Todo el CO2 que quemamos va a esta frágil capa que es nuestra atmósfera”. Le enseña al actor
el modelo de simulación de la tierra de la NASA alimentado por el monitoreo de 20 satélites.
El derretimiento de Groenlandia detendrá el transporte de calor de la corriente del Golfo de México y Europa se congelará. Ese es el gran malentendido sobre el CC pensar que todo se calienta más. La temperatura del planeta al aumentar en promedio crea climas más extremos, fenómenos climáticos más fuertes. Más sequías en Siria, Sudan, el norte de Africa y el oeste de EU, India, el centro de México.
Y cuando platica en India con una prestigiosa ambientalista Sunita Narain que critica el modelo de consumo de los norteamericanos. “Tenemos que modificar nuestros hábitos y costumbres”, admite Dicaprio. Un tema al que ningún político le quiere entrar. Si la opinión pública lo pide los políticos en EU se van a alinear de inmediato, dice el documental.
El documental no plantea nada novedoso, pero si da argumentos científicos y de un presidente popular como Obama sobre la urgente necesidad de entrarle de ya a paliar al CC con acciones personales como el cambio de patrones de consumo. No solamente cambiar los focos en nuestras casas por focos ahorradores sino un estilo de vida más austero y sustentable.
Tiene su parte chantajista, si no, no estaría hecho en EU, con la histor
Es una tesis que ya habíamos manejado. El gobierno de EU conocía del CC desde los 50´s y el presidente Kennedy recibía informes sobre sus posibles efectos y no hizo nada por detenerlo por ayudar a sus grandes corporaciones financieras. Tanto Dicaprio como Obama reconocen que será difícil que los estadounidenses lo acepten y cambien sus hábitos. Hacia el final Dicaprio reflexiona sobre el cuadro del Jardín de las delicias del Bosco, que es su gancho. El pintor plasma la fragilidad del planeta. El Papa
Francisco en su encíclica pide a los católicos cuidar nuestro hogar, la Tierra.
Hay un problema seamos realistas, busquemos una salida y se puede salir. Soy optimista. Tengo fe en la gente. Hay una oportunidad de reparar esto. Es importante reconocer que siempre ha una salida, que podemos re direccionar nuestros pasos. Hay esperanza. Termina Sellers.
Finaliza con el discurso de Dicaprio el día de la ratificación del acuerdo de Paris en la sede de la ONU cuando le pide a los delegados tomar acciones “hacer algo más que promesas porque si no, nosotros y todos los que vivimos en la tierra seremos historia”