Según la hora y fecha registradas en una de las imágenes, el cura y el menor de edad ingresaron solos y por su propio pie al hotel la mañana del martes, al otro día del presunto plagio.
Quadratín se desplazó al lugar de los hechos y ahí conoció que afuera del establecimiento donde fue visto el sacerdote, también se observó un automóvil marca VW, tipo Jetta, color blanco, el mismo que se ha dicho fue robado al cura, lo que pondría en duda que se tratara de un secuestro.
Acto seguido, el sacerdote le pidió a la auxiliar doméstica no se presentara a laborar el lunes, sin una explicación aparentemente convincente, para luego desaparecer él y su coche.
La siguiente aparición del cura fue en el hotel el martes por la mañana, el cual abandonó ese mismo día por la tarde, sin que hasta ahora las autoridades sepan su paradero.
Por parte de la Iglesia católica, a Puruándiro acudió este jueves el cardenal y arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, a celebrar misa y pedir en el púlpito por la pronta aparición del párroco.
Este mismo jueves, el purpurado declaró que el sacerdote había sido víctima de la delincuencia organizada, y afirmó que se trató de un secuestro, robo de vehículo y saqueo de la casa parroquial.
En Puruándiro se mantiene presencia de personal de la Procuraduría estatal e instituciones federales, que trabaja a marchas forzadas para dar con el paradero del cura.
Fuente: MVS