“Eso fue de un gusto infecto”, reconoció en el programa Con Puig. El ex director de Tv UNAM, aseguró sentirse triste pero más que por haber dejado las riendas de la televisora universitaria, “el proyecto del que estoy más orgulloso en mi vida profesional”, por la reacción que se dio tanto en las redes sociales como en algunas instituciones.
“Me entristece profundamente que las redes sociales se usen como se usan. Me entristece profundamente que instituciones hagan juicios sumarios a ciudadanos. Me entristece profundamente que no tengamos una verdadera cultura democrática en nuestro país y me parece que soy un síntoma, mi tristeza como ciudadano es grave: tengo demasiadas preguntas que todavía me habitan”, dijo Nicolás Alvarado.
“Lo más importante de lo que quise decir, que no se entendió, es que todos ejercemos prácticas discriminatorias súper raras; todos somos, sin darnos cuenta y con frecuencia, homofóbicos, heterofóbicos, clasistas… y yo me descubrí siendo clasista. “Platicando con un amigo, me acorraló con sus argumentos hasta demostrarme que mi problema con Juan Gabriel no era un problema prosódico, musical o estético, sino era un problema clasista”.
Acerca de su renuncia a Tv UNAM, Alvarado comentó a Carlos Puig que lo había hecho para tener libertad periodística, sobre todo porque le resulta más importante ser el escritor que es y ejercer el periodismo cultural como lo ha desarrollado hasta la fecha. “Me importa más escribir el texto que puedo escribir, ejercer el periodismo cultural como lo ejerzo, que tener chamba de funcionario público, porque la idea ya estaba en la pantalla de la televisión, en la de la computadora, en la del teléfono y en la iPhone y había quien la pudiera continuar. Y no le estaba haciendo bien a un amigo, no a un institución, a un amigo entrañable y querido que se llama Enrique Graue (rector de la UNAM)”, enfatizó el periodista.
Fuente: Milenio