En el artículo «¿Por qué la iglesia se opone a la iniciativa del Presidente que promueve el «matrimonio igualitario»?«, publicado en el semanario Desde la Fe, se afirma que la Iglesia ama a los homosexuales y que tiene cinco razones para no aprobar el matrimonio gay:
«La Palabra de Dios lo rechaza; no santifica ni da vida; causa daños físicos, psicológicos y espirituales; donde se ha legalizado se ha atentado contra la libertad de conciencia y de expresión, y como se opone a la voluntad de Dios, pone a los involucrados en grave riesgo de perder su salvación», se lee en la publicación.
Consideró preocupante legalizar el matrimonio gay, porque, afirma, en los países en donde se legalizó el matrimonio entre parejas del mismo sexo como en Estados Unidos y Suiza, «ya hay solicitudes para legalizar matrimonios entre varias mujeres y hombres, entre parientes, entre adultos y niños, incluso entre humanos y animales. ¿Cuál es el límite y quién se atreve a ponerlo?».
Afirma que la unión entre personas del mismo sexo «sí nos afecta, afecta a la sociedad en su conjunto».
«Como católicos nunca debemos desentendernos de lo que ocurre a otros hermanos, y segundo, que el ‘matrimonio gay’ sí nos afecta, afecta a la sociedad en su conjunto».
En el artículo se destaca que en los países en donde se legalizó el matrimonio entre parejas del mismo sexo «se le ha dado una intensa promoción a nivel gubernamental y educativo, dirigida sobre todo a jóvenes y niños, respaldada en redes sociales y medios de comunicación».
Y que en esos lugares se ataca a quienes se oponen a esas uniones y se presiona a los centros de adopción a dar preferencia a las parejas de matrimonios de homosexuales.
«Los homosexuales exigen tolerancia, pero la mayoría de los ellos son intolerantes», afirma.
Fuente: Milenio