Al percatarse de la presencia de los uniformados, los civiles armados comenzaron el ataque que se prolongó durante cuatro horas. Al conocer los hechos, integrantes de la Unidad de Fuerzas Especiales de la Secretaría de Seguridad Pública se trasladaron al lugar a bordo de un helicóptero del estado.
También se trasladó un helicóptero propiedad de la Marina, que transportaba a otros 20 policías estatales pertenecientes a la misma unidad; sin embargo, por las condiciones climatológicas que imperaban en la zona, fue imposible brindar el apoyo requerido.
Varias bases de operaciones del Ejército que operan en la Sierra, se trasladaron al lugar de los hechos en apoyo a los elementos policiales emboscados, realizando reconocimientos en las laderas desde donde fueron atacados. Esto permitió que los delincuentes detuvieran su ataque y se dieran a la fuga. Pese al operativo para dar con los agresores, ninguna persona fue detenida.
Fuente: Milenio