Dialogo hasta donde tope, es consigna del Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, para resolver el lío con la CNTE, que hace mucho dejo de ser tema educativo solamente; es crisis de gobernabilidad, alega el Sector Privado al exigir el uso de la fuerza pública.
Empresarios, hartos del pleito aumentan la presión por perdidas millonarias, que según cálculos, fluctúan entre 4 mil y 7 mil 500 millones de pesos en los estados conflictivos.
Alega Luis Miguel González, director de El Economista: “marchas y bloqueos de la CNTE provocan más daños que un huracán”.
Explica –en entrevista– que la metáfora aplica si contamos que la “resistencia” magisterial ha costado al comercio y turismo de Oaxaca 1 mil 700 millones de pesos; 5 millones diarios en Guerrero; 8 en Morelia; 3 en Chiapas, y cerca de 60 en la CDMX.
El impacto destructor del conflicto docente resulta peor que los daños de un meteoro magno; 80 días de duro y dale, perseverancia dicen, termina por perforar la roca más sólida; ¿como tormento chino?
A quienes consideran prioritario el sagrado derecho a la manifestación, por encima de otros derechos, esto podría parecer una herejía.
Del lado de la IP el hartazgo tampoco tiene límite.
Industriales amagan con suspender inversiones. Sume la amenaza de CONCANACO de no pagar impuestos, ante lo cual Aristóteles Núñez, titular del SAT, corta cartucho: “no se puede combatir la ilegalidad con ilegalidad”. Sordos a la advertencia, comerciantes convocan a paro en las zonas de conflicto; se colocan en la misma dinámica de la CNTE al optar por el chantaje y la violación de la ley.
El Secretario de Gobernación pide valorar los resultados del diálogo con el magisterio; asegura que las circunstancias son totalmente diferentes a las de hace unas semanas; vislumbra una salida al conflicto, en breve.
Sin embargo, las cuentas no salen; aún no percibimos saldo positivo de los acuerdos en las mesas de Bucareli. ¿Osorio Chong está obligado a guardar prudencia?
Claudio X. González, presidente de la organización civil Mexicanos Primero, opina lo contario; acusa una lastimosa debilidad gubernamental reflejada en el peor de los mensajes: “delinque, vandaliza, toma carreteras, y luego yo te recibo para darte lo que quieras”.
Sí, el camino para resolver conflicto con la CNTE está empedrado de intereses; todos buscan resolver urgencias propias; comerciantes, industriales, patrones y empresarios quieren su “lana”; empleados, temen perder “chambas”; maestros exigen derogar la reforma educativa para mantener privilegios…
EL MONJE PROTESTANTE: ¿Ya cayó, ya cayo… la reforma ya cayó?