Un estudio de la escuela de negocios de la Universidad de Oxford reveló que los Juegos Olímpicos de Río 2016 costarán 4 mil 600 millones de dólares, con un sobrecosto del 51 por ciento en un país que se enfrenta a un segundo año de contracción económica.
Cuando falta menos de un mes para la ceremonia inaugural, el estado de Río de Janeiro está cerca de la quiebra y ha demorado el pago de los salarios de los empleados públicos, incluida la policía.
Esto plantea preocupación en cuanto a la seguridad en momentos en que un aumento repentino de los delitos incluyó la aparición de un pie amputado cerca del estadio olímpico de vóleibol la semana pasada.
Algunos atletas han decidido no participar por temor al virus del zika, mientras que otros expresaron su inquietud por competir en aguas contaminadas.
“Los sobrecostos de más de mil millones de dólares por los Juegos de Río surgen en un momento en que Brasil difícilmente pueda pagarlos, dado que se enfrenta a la peor crisis económica y política desde la década de 1930 y que el estado de Río de Janeiro se ha visto particularmente afectado por la recesión”, expresó en un correo electrónico Bent Flyvbjerg, investigador principal del estudio.
El informe de Flyvbjerg, Alexander Budzier y Allison Stewart de la Escuela de Negocios Said reveló que los Juegos Olímpicos de la última década costaron en promedio 8 mil 900 millones de dólares, sin incluir la infraestructura de rutas, trenes, aeropuertos y hoteles.
Si bien los sobrecostos se producen en un momento desafortunado para Brasil, Río 2016 será más barato que los juegos de verano recientes.
El estudio mostró que los sobrecostos de Sochi y Londres fueron del 289 por ciento y el 76 por ciento respectivamente. Todos los juegos celebrados desde 1960 que fueron parte del estudio costaron más de lo previsto.
“Si uno quisiera hacer que fuera lo más difícil posible realizar un megaproyecto respetando el presupuesto, haría exactamente lo que se hace en los juegos”, dijo Flyvbjerg.
“Armaría un equipo que nunca antes realizó este tipo de proyecto, en un lugar que nunca vio un proyecto como ese. Después implementaría un proceso de licitaciones poco transparente y sumamente cuestionable que fomentara las sobrepujas y no atribuyera la responsabilidad por los costos a la entidad que decide quién gana la licitación”.
Un portavoz del comité organizador de Río 2016, que cuenta con financiamiento privado, dijo al responder preguntas por correo electrónico que no hubo sobrecostos después de tomar en cuenta la inflación y que el informe de Oxford es una especulación que busca dar una imagen negativa de los juegos.
“Cuando nos vimos en una situación de posibles sobrecostos, de inmediato implementamos una serie de medidas de reducción de costos”, señaló la persona. “Estamos organizando unos juegos racionales, modernos y eficientes”.
Flyvbjerg dice que el informe ajustó los datos de costos por inflación, haciendo cálculos “conservadores” de los sobrecostos. El análisis del informe incluye los costos de los juegos relacionados con los deportes.
Esto comprende los costos operativos del comité organizador y los costos directos de capital en que incurrieron la ciudad sede o los inversionistas privados para construir las instalaciones deportivas y no incluye los costos indirectos relacionados con las mejoras a la infraestructura y los hoteles.
El estudio calcula los sobrecostos sobre la base del presupuesto y las estimaciones de ingresos utilizadas cuando la ciudad compitió para ser la sede de los juegos. Río ganó esa competencia en 2009.
Fuente: El Financiero